SANTO DOMINGO.- En conmemoración a la fiesta de La Virgen de la Altagracia del 21 de enero, Larimar Films honra la devoción a la madre de Jesús y Madre protectora del pueblo dominicano con un emotivo cortometraje titulado: “Ayer, Hoy Y Siempre”, el cual puede verse en su página de Facebook https://www.facebook.com/LarimarFilms

El cortometraje se hizo eco en las redes sociales tan pronto fue publicado, con más de 23,000 reproducciones en tan sólo 2 días.

Su productora, Elsa Turull de Alma, señala: “El público se ha identificado con el corto pues es una historia real y no manipulada, contada por su protagonista, Aurora Santana, abuela de la niña Annellyz Japa, quienes comparten una historia de amor, fe y esperanza. Este cortometraje ha sido realizado con mucha dedicación y respeto, honrando a las personas que creen en el poder de la sanación y al mismo tiempo elevando nuestra devoción a la Madre de Jesús”.

El cortometraje fue concebido durante el rodaje del proyecto “Camino a Higüey”, película con testimonios reales, la cual se encuentra en su etapa final de postproducción y más adelante se darán a conocer los detalles a la prensa.

“El testimonio de Aurora y Annellyz, llamó nuestra atención y sentimos la necesidad de crear una pieza que muestre cómo la fe ayuda en momentos de carencias y debilidades”, añadió Turull de Alma.

La dirección del cortometraje estuvo a cargo de Caroline Beltré
La dirección del cortometraje estuvo a cargo de Caroline Beltré

La dirección del cortometraje estuvo a cargo de Caroline Beltré y la dirección de fotografía por Christian Castillo. También contó con la participación de José Delio Ares como editor y musicalizador, Francisco Valdez en la colorización y David Hernández en la mezcla de sonido. Esta sinergia de talentos dio como resultado que el cortometraje fuera Selección oficial del Festival de Cine de FUNGLODE en su 9na edición.

Sobre la historia

En la alegría de recibir a su nieta, Aurora Santana, una enfermera dominicana con toda la tecnología, experiencia y recursos de la medicina a su disposición, recibe la noticia de que la niña padece una enfermedad cardíaca congénita, con poca esperanza de vida. Como católica, se apoya en su fe y busca la intercesión de la Virgen de la Altagracia, Madre Protectora del pueblo dominicano.