No caben dudas que esta fórmula de los “tres amigos” resultó una comedia factible para las nuevas audiencias, y recupera elementos importantes dentro de lo que es la comedia apoyada en situaciones hilarantes.
“¿Qué pasó ayer’” (The Hangover) se convirtió en un buen ejemplo de cómo se puede escribir una comedia con un buen equilibro entre los personajes y las situaciones que ellos mismos protagonizaban.
A Todd Phillips, realizador de otros productos como Road Trip (2000), Old School (2003), esta franquicia le otorgó el mayor listón que a un director de este género pueda alcanzar.
Esta secuela y última parte de la serie, se apoya en las situaciones dejadas por las dos anteriores que, esta tercera parte, sirven de base sustancial para mover su final por los caminos más convenientes.
Phil, Stu y Doug, los tres sobrevivientes de las locuras anteriores, regresan a un nuevo escenario, pero con la herencia de sus acciones anteriores.
En esta ocasión la resaca no es el tirón de fondo, más bien es la acción de uno de los personajes: Leslie Chow que moverá todo. Leslie, quien estando como prisionero en una cárcel tailandesa, logra escapar conectándose nuevamente con sus tres amigos, pero para iniciar una nueva desgracia para el grupo.
El robo de unos lingotes de oro será la causa para el secuestro de uno de ellos, obligándolos a recuperar el botín para salvar a su amigo.
Esta tercera parte, aunque se mantiene por debajo de la segunda en cuanto a las bizarras situaciones que envuelven a estos personajes, logra empujar el guión por varios caminos con el solo fin de justificar una buena conclusión.