Título original: The Expendables 3. Género: Acción. Dirección: Patrick Hughes. Guión: Sylvester Stallone. Richard Wenk. Reparto: Sylvester Stallone, Jason Statham, Jet Li, Dolph Lundgren, Randy Couture, Terry Crews, Arnold Schwarzenegger, Wesley Snipes, Antonio Banderas, Mel Gibson, Harrison Ford y Kellan Lutz. Duración: 2 horas 6 minutos. Clasificación: + 16 años. País: USA
Era de esperarse que Sylvester Stallone extendiera aún más su relato de acción el cual le ha servido para rememorar viejos tiempos.
“Los Indestructibles” ha significado para su carrera, al igual que para los demás actores que intervienen, un revival de los roles que le dieron dinero y fama.
Ante la crisis de héroes de acción en la pantalla, su demostración ha sido consumada en un producto cinematográfico que apunta al tipo de acción de la vieja escuela que no escatima recursos para lograr escenas espectaculares con el fin de impactar en el público nostálgico y en las nuevas audiencias.
Stallone, productor y guionista, toma las riendas de un filme que ya se nota su desgaste y ocaso como las viejas carreras de los antiguos protagonistas.
Teniendo la presencia de Jason Statham, Jet Li, Dolph Lundgren, Randy Couture, Terry Crews, Arnold Schwarzenegger, Wesley Snipes, Antonio Banderas, Mel Gibson y Harrison Ford, “Los Indestructibles” continua con una nueva misión de enfrentar al que fue el fundador del equipo de mercenarios, puesto que se ha convertido en una amenaza mundial por el tipo de armas que trafica.
Pero en esta ocasión un reclutamiento de nuevos expertos unificará el uso de alta tecnología con las habilidades de combate de la vieja escuela.
El filme es una justificación, nueva vez, para apostar por la garantía de la empatía de estos viejos actores con las audiencias más jóvenes.
Utilizando la misma fórmula del género de la acción, la película se describe a sí misma como un producto de evasión y nada más.
El resultado de todo esto es un filme cargado de mucho ruido y poco atractivo con el conflicto de ver los intentos de estos actores de sobrevivir a un panorama que ya no le ofrece los privilegios de años anteriores.