Lo que siento por ti

Título original: Lo que siento por ti. Género: Drama. Dirección: Raúl Camilo. Guión: Giovanna Bonnelly. Reparto: Gabriela de la Garza, Robinson Díaz, Nashla Bogaert, Frank Perozo, Nashla Bogaert, Yordanka Ariosa, Félix Germán, Vicente Santos, Luis José Germán, Luis Oscar Villanueva, Javier Alejo, Zoilo Batista. Duración: 1 hora 30 minutos.  País: República Dominicana

El cine dominicano, aunque todavía no posee una identidad propia, si puedo señalar que posee líneas temáticas que han podido establecer discursos para hablar de diferentes temas sociales presentes en esta sociedad.

Una de esas líneas temáticas, presentado en el panorama fílmico local, es el tema de la inclusión social, debatido en una primera experiencia por José Enrique Pintor en “Mañana no te olvides” (2017) en la que personajes con Síndrome de Down fueron visibilizados dentro de una historia dominicana.

Ahora Raúl Camilo toma esa misma línea argumental para desarrollar una historia en la que personajes con condiciones parecidas, son partes esenciales dentro de una narrativa que tiene su ojo puesto en el discurso de la inclusión y las lecciones que puede ofrecer la vida.

“Lo que siento por ti” enlaza tres historias reales que se narran de manera paralela para contar tres vivencias distintas sobre la base de mostrar cómo se puede enfrentar la situación de jóvenes con condiciones especiales dentro de un contexto social muchas veces adverso para desarrollarse como entes útiles.

Una de estas es la historia de Ana, madre soltera, abandonada por su marido y con sus dos hijos adolescentes autistas; Jorge y Diana un matrimonio que se derrumba mientras se intenta sin éxito tener hijos, y la historia de Carlos padre de un niño con Down que paulatinamente va compenetrándose con el mundo de su hijo comprendiendo así sus potencialidades y anhelos.

Este es el cuadro dramático que plantea Camilo a través del guion de Giovanna Bonnelly quien se enfrenta al riesgo de caer en el lado sensiblero de historias de vida, pero que logra un convencimiento adecuado al no saturar el peso de los personajes y de las historias con intenciones pueriles.

Camilo, sabiendo sus intenciones de antemano, no utiliza todo el tema a su favor -que sería el lado más fácil para captar la benevolencia del espectador-, más bien muestra su idea como una forma de acercar esta realidad hacia esos movimientos sociales presentes en el país que están trabajando en este sentido.

Su elenco ha sido vital para demostrar que su opera prima puede tener calidad suficiente en la construcción de los personajes presentes en la historia. Félix Germán, de amplia trayectoria en teatro y cine, fue uno de esos aciertos dentro de su catálogo de actores, pues su personaje comparte la garantía de captar inmediatamente la atención del público y verlo transformándose en la medida de su desarrollo en el relato.

Nashala Bogaert y Frank Perozo asumen, como pareja en el filme, un adecuado equilibrio en la proyección de las emociones que transmiten sus respectivos personajes. Mientras que la actriz cubana Yordanka Ariosa, galardona por su papel en “El rey de La Habana” (Agustí Villaronga, 2015) demuestra una vez más su acierto en su personaje como mujer de empoderamiento decidida a no doblegarse por las circunstancias.

Este es el terreno donde Camilo enfrenta su idea a través de una imagen de historias particulares para un gran problema social.