Llámame por tu nombre

Título original: Call Me by your Name. Género: Drama.Dirección:Luca Guadagnino. Guión:James Ivory (Novela: André Aciman).Reparto:TimothéeChalamet, ArmieHammer, Michael Stuhlbarg, Amira Casar, Esther Garrel.Duración: 2 horas 10 minutos. Clasificación:+ 18 años. País: Italia.

El romance es romance no importa en qué posición se establezca. La pérdida es pérdida sin importar la edad. Esto lo tiene muy bien definido el director Luca Guadagnino (Yo soy el amor, 2009) quien se apoya en un texto escrito por un maestro del cine como lo es James Ivory quien adapta la novela de André Aciman.

La historia se establece en 1983 en la región de Liguria, en el norte soleado de Italia,donde de Elio, un joven de 17 años, pasa el cálido verano en la casa de campo de sus padres.

Su quietud queda interrumpida por la llegada de Oliver, un amigo americano de su padre que tiene raíces judías. Este encuentro despierta en ambos un efecto de fuerte contextura sentimental que se va profundizando en la medida de la estadía de Oliver en la campiña.

El contexto es primordial para que Guadagnino establezca el espacio dramático vital para que estos dos personajes se muevan a plenitud. Para esto establece distintas locaciones donde el tiempo se mueve lentamente y donde la prisa no tiene cabida.

La cámara que establece el realizador en los distintos lugares tanto interiores como exteriores, es la garantía para esculpir una imagen nostálgica y llena de motivaciones.

No es de dudar que el conocimiento autodidacta y cinéfilo de Guadagnino le favorecen grandemente cuando remite su mirada a ese cine francés de Eric Rohmer o François Truffaut, obsequiando al espectador una visión intimista y calculada de sus intenciones visuales.

Timotheé Chalamet, como el joven Elio y Armie Hammer como Oliver, declaran un trabajo adecuado a las implicaciones de sus propios personajes, llevándolo por rincones muy delimitados sin el temor de estereotiparlos y donde el espectador se convierte en un testigo del salto pasional de ambos.

Un filme que, con una lectura adecuada, simboliza una cara particular que habla sobre la pasión, la pérdida y la nostalgia.