Título original: La tierra y la sombra. Género: Drama. Dirección: César Augusto Acevedo. Guión: César Augusto Acevedo. Reparto: José Felipe Cárdenas, Haimer Leal, Edison Raigosa, Hilda Ruiz, Marleyda Soto. Duración: 1 hora 37 minutos. Clasificación: + 12 años. País: Colombia
El cine colombiano viene teniendo una constante evolución tanto de sus temas como de las técnicas de narración.
Y esto se debe, en mayor parte, a la nueva generación de realizadores que se sienten comprometidos en abordar nuevos temas sobre la realidad de su país.
El caso de César Augusto Acevedo, graduado con honores de la Escuela de Comunicación de la Universidad del Valle, es uno de esos ejemplos de cineastas que desean hacer contribuciones serias a la cinematografía propia y latinoamericana.
Con su Opera Prima, la cual ha alcanzado múltiples premios nacionales e internacionales, Acevedo demuestra su aguda sensibilidad para retratar los problemas sociales que afectan a su país a través de un discurso sosegado y profundo.
La historia toca la idea del abandono y el regreso a través de un padre que retorna, después de 17 años, al hogar que dejó debido a que su único hijo padece una grave enfermedad. Esto lo obliga a enfrentar ese pasado y a solucionar relaciones familiares desmanteladas y marchitas.
La historia construida por este realizador está cargada de soledad y tristeza de un país sumido por la crisis, donde se logra plasmar con detalles impresionantes. Los cañaverales se convierten en parte de esa sombra de la pujanza económica que hoy que está a punto de desplazar a cientos de trabajadores.
Pero, a pesar de este cuadro gris, es a la vez una historia de una familia unida por el amor y la escasez, que busca, de la mejor manera posible, encontrar una salida hacia un mejor futuro.
Su abordaje de estos temas se hace de una manera pausada como si se estuviera viendo un cuadro, lo cual permite reflexionar sobre la situación de sus personajes junto a su fotografía que deja plasmado esto y todo lo demás.
Una obra que vuelve a dar esperanza sobre la revitalización de un cine de la región maduro y con la certeza de seguir creando una identidad latinoamericana.