París, Francia, 11 feb (EFE).- La Academia de Cine francesa ha decidido revisar sus estatutos para ser paritaria y acallar las críticas que, a pocos días antes de su ceremonia anual de entrega de premios, la acusan también de elitista y opaca.

Su Consejo de Administración indicó en un comunicado que este mismo martes solicitará al Centro Nacional Cinematográfico (CNC) que nombre un mediador encargado de llevar a cabo esa reforma "profunda" de sus reglas y de su modo de gobierno.

Lo hace un día después de que la Asociación para la Promoción del Cine, que rige la Academia, avanzara que el primer eje de esa revisión será lograr antes de finales de año la paridad tanto en su Asamblea General como en su Consejo de Administración.

En esa primera instancia solo ocho de sus 47 miembros son mujeres, y, en la segunda, seis de los 21.

Además, la Asociación se ha comprometido a trabajar para que también haya equilibrio de género entre los 4.680 miembros de la Academia, que son quienes nominan y votan las mejores películas de cada año, y entre los cuales el 65 % son hombres.

Aunque la Academia no selecciona directamente a sus integrantes, porque son estos los que deben presentarse candidatos y ven su candidatura automáticamente validada si cumplen los requisitos, ese organismo contempla suavizar algunas condiciones para que más profesionales del cine puedan formar parte.

En la actualidad hay que tener dos padrinos y haber trabajado en tres películas en los últimos cinco años, una cifra que el presidente de la Academia, Alain Terzian, estudia rebajar a dos filmes.

Se va a poner en marcha "una revolución cultural para conseguir la paridad", indicó este domingo en el dominical "Le Journal du Dimanche".

Terzian confía en acabar con una situación "anacrónica" y en que ese cambio sirva de ejemplo y repercuta en todo el cine francés.

"Es cierto que tendríamos que habernos despertado antes", admite un directivo al que este lunes cerca de 200 actores, directores y profesionales cinematográficos criticaron por considerar sus propuestas insuficientes.

Intérpretes como Chiara Mastroianni, Bérenice Bejo u Omar Sy, o directores como Bertrand Tavernier o Céline Sciamma denunciaron conjuntamente en el diario "Le Monde" que la actual estructura "no refleja la vitalidad del cine francés actual".

Se quejan de la opacidad de las cuentas de la Academia y de no tener voz ni en su funcionamiento ni en el desarrollo de la entrega de los premios César, que este 28 de febrero celebrará su 45ª ceremonia.

Una gala que, antes de esta nueva oleada de críticas, ya estaba rodeada de polémica después de que "J’accuse", de Roman Polanski, acapare con "Les Misérables", de Ladj Ly, el mayor número de nominaciones, doce en total.

La asociación feminista Osez le Féminisme ha convocado una manifestación ese día en contra de esa lluvia de nominaciones conseguida por el director franco-polaco, acusado de agresiones por varias mujeres, y del que se conoció la última denuncia en su contra en plena promoción de su última cinta. EFE