Después de su primera adaptación al cine en el 2009, este producto de la franquicia de juegos Hasbro, la misma propietaria de Los Transformers, ha dado su segundo paso comercial en la segunda parte de las acciones de este grupo élite de soldados.
En esta secuela, los G.I Joe, su enemigo mortal llamado Cobra, continúa siendo una amenaza para el grupo, pero otro peligro los acecha directamente desde la Casa Blanca.
Con reparto encabezado por el actor Dwayne Johnson (La Roca), el filme se decanta por un relato que pretende esforzarse y dejar establecido un esquema de filme de acción y aventura.
Con varias acrobacias estilísticas dentro de su contexto el filme toma el camino más fácil de elaborar una estructura narrativa que no sucumba en los primeros minutos.
Su primera parte es una síntesis breve de lo que va a ocurrir posteriormente con varios giros dentro de su relato.
La presencia de Bruce Willis, aún poseedor de cuotas importantes dentro de la taquilla, le ofrece, por lo menos, una garantía para que el filme no se destruya antes de alcanzar su final.
Lo demás es un circo de efectos visuales que recurrirá a todo para vender este filme al público general.