Título original: Ant-Man Género: Ciencia Ficción/Fantástico Dirección: Peyton Reed. Guión: Adam McKay, Paul Rudd, Gabriel Ferrari y Andrew Barrer (Historia: Edgar Wright, Joe Cornish; Comic: Stan Lee, Jack Kirby). Reparto: Paul Rudd, Michael Douglas, Evangeline Lilly, Corey Stoll. Duración: 1 hora 55 minutos Clasificación: + 12 años. País: USA
Aquí se tiene otro producto de la Marvel, compañía que siempre se dispone en calentar un verano con héroes mecánicos que llenan la pantalla para satisfacer el desencanto de un público que no tiene más remedio que ir al cine para ver si algo lo entretiene.
Después de las exitosas experimentaciones con “Los vengadores”, “Iron man”, “Guardianes de la galaxia”, ahora le toca el turno al héroe más pequeño de la casa, no por ser pequeño es menos atractivo, sino que su entrada al mundo cinematográfico dependía de lo alcanzable por sus hermanos de carpeta.
Esta adaptación del cómic de Marvel “Ant-Man” de Stan Lee y Jack Kirby, cuenta la historia de Hank Pym, un científico que ha logrado, a través de sus experimentos, poder modificar el tamaño de las cosas y llevarlo a la escala de un insecto.
Su ética va en contra de la utilización de su experimento como arma militar por lo cual lo enfrenta a su antiguo pupilo quien se obsesiona por copiar la fórmula de Pym.
Mientras que Pym selecciona para ser su Hombre Hormiga a un sujeto con un pasado carcelario llamado Scott Lang. Scott encuentra su redención sirviéndose para tal experimento y luchar en contra de los que desean vender el proyecto.
Para esto, un casco le permitirá comunicarse con las hormigas logrando enrolar todo un ejército de distintas especies para combatir a los enemigos.
Todo este universo fantástico trata de no inclinarse por las consabidas maniobras que caracterizan las aventuras de los superhéroes y se resume en ofrecer un relato atractivo en los términos que la misma historia permite.
Paul Rudd, sin tener el atractivo y carisma de Robert Dpwney jr., quien ya se conoce las manías de Iron Man, construye para sí mismo un perfil que logra concentrar ciertas miradas hacia él.
Michael Douglas, como el doctor Pym, no rivaliza mucho con su personaje y lo retiene como una figura simbólica de lo que puede ser la ética científica.
El villano en cuestión, interpretado por Corey Stoll, un antagonista que engrosa la lista de aquellos infames personajes alopécicos que han determinado muchas de las cuestiones fundamentales del accionar y osadía de los superhéroes.
El director Peyton Reed (“Yes Man”, 2008) ilumina varias de las escenas, principalmente aquellas de los enfrentamientos, manejadas con muy buen toque de humor y variabilidad.
El “Hombre Hormiga” a pesar de que no es un filme perfecto, dado su poca profundidad de los diálogos y otras cuestiones de fondo, es un buen cuento narrado con versatilidad y dinamismo.