Si vieron a "Taken" (Búsqueda Implacable) en la que Neeson pasa por situaciones desesperantes para encontrar a su hija secuestrada, entonces a este filme le encontrarán puntos parecidos.

La historia inicia cuando la pareja conformada por el doctor Martin Harris y su esposa llegan a Berlín para asistir como invitado a una conferencia sobre biotecnología. Por un asunto inesperado, el doctor Harris sufre un accidente el cual queda en coma durante los próximos cuatro días.

Una vez que despierta en el hospital se da cuenta de que otro está suplantando su identidad. Este jalón dramático es el principio para dejar la confusión dentro del público que, al igual que el personaje, tiene que descubrir qué es lo que está sucediendo.

La búsqueda de la verdad lo conduce a una serie de situaciones que cada vez más se le van complicando, donde la trama cada vez más se va retorciendo y produciendo nudos dramáticos.

Lo lamentable de este thriller es que asume todas las fórmulas narrativas posibles sin dejar caer algún viso de originalidad.

La trama está construida bajo un esquema reiterativo que al final es siempre la misma regla de sorpresa donde se descubre toda la verdad.

El director es Jaume Collet-Serra, reconocido por dirigir películas como "La Casa de Cera" y "La Huérfana", no le interesa llevar el género más allá de las convencionalidades y se ajusta a sí mismo una camisa de fuerza.

No podemos negar que por lo menos posee buen ritmo y que la presencia de Liam Neeson le proporciona cierto atractivo al filme, ajustándose a lo reglamentariamente adecuado para estos casos, aunque es más de lo mismo.