Título original: Lady Bird. Género: Drama. Dirección: Greta Gerwig. Guión: Greta Gerwig. Reparto: Saoirse Ronan, Laurie Metcalf, Lucas Hedges, John Karna, Beanie Feldstein. Duración: 1 hora 34 minutos. Clasificación: + 14 años. País:
Greta Celeste Gerwig, actriz y directora estadounidense, es una profesional que ha estado bebiendo de la fuente del cine independiente desde sus inicios y construyéndose así misma desde estas gradas.
Conocida por su participación en el movimiento de cine “mumblecore”, ese subgénero independiente caracterizado por el naturalismo de las actuaciones y la improvisación de los diálogos, Gerwig insiste en desarrollar un tipo de cine que vaya en consonancia con los preceptos de lograr grandes resultados a través de la exposición simple.
Este nuevo salto en la dirección viene precedido con algunas colaboraciones con otros realizadores, en especial el director Joe Swanberg en el filme “Nights and Weekends” (2008), escrita, dirigida y protagonizada por ambos.
Con “Lady Bird” se puede decir que es su gran película personal como directora y escritora. La misma, con tintes biográficos, intenta reflejar el mundo de una adolescente que se muda al norte de California para pasar allí su último año de instituto.
Tras la sombra de su madre, ella intenta definirse a sí misma dentro de un mundo de conflictos adolecentes y de descubrimientos existenciales en lo que recorre una serie de eventos que marcan la visión de la joven como el amor, el desengaño, la ruptura, la amistad y una relación parental más allá de los convencionalismos. Complejo mundo de veleidades y situaciones de experiencias personales.
Gerwig dibuja a sus personajes de una manera singular que, con todo el cariño posible, deja que ellos circunden el contexto dramático y expongan sus realidades y conflictos. Su mirada nostálgica a la adolescencia la realiza huyéndole a los artificios que muchas películas han ofrecido, presentándose de una manera natural y convincente.
Su musa, la actriz Saoirse Ronan, ofrece una cálida interpretación de esa chica iconoclasta, decidida a cambiar aquellas cosas que no son importantes por otras que le ayuden a crecer como persona.
Este ejercicio desarrollado por Gerwig es la clara evidencia de que en el cine la simpleza del texto y de la narrativa visual, debe primar en todo sentido si se quiere definir una historia que llegue lo más directamente posible a la audiencia.
Con “Lady Bird” la directora logra contar una historia que determina su pulso indiscutible para hacer de lo cotidiano una exposición sincera y verdadera sobre los avatares existenciales que enfrenta los adolescentes en cualquier época.