La revista satírica francesa Charlie Hebdo publicó una edición que conmemora las víctimas de la violencia extremista en París, la semana pasada, usando una imagen del profeta Mahoma en la portada. La mayoría de los musulmanes consideran que las representaciones pictóricas del fundador del islam están prohibidas. Pero ¿habrá sido ese siempre el caso?
(Este artículo contiene una imagen histórica del profeta Mahoma)
Si por un momento pudiera hacer a un lado el asunto de si las caricaturas satíricas del profeta Mahoma son insultantes, hay un debate separado y complicado sobre si cualquier representación pictórica, inclusive respetuosa, es prohibida por el islam.
Para la mayoría de los musulmanes es algo que está absolutamente prohibido; Mahoma, o cualquier otro profeta del islam, no deben ser representados de ninguna manera. Se considera que las imágenes, así como las estatuas, fomentan la idolatría.
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Esto es indiscutible en muchas partes del mundo musulmán. Históricamente, las formas dominantes del arte islámico han sido en patrones de remolinos geométricos o caligrafía, en lugar de arte figurativo.
Versos del Corán
Los musulmanes citan un verso en el Corán que alude a Abraham, a quien consideran un profeta:
"(Abraham) le dijo a su padre y a su pueblo: '¿Qué son estas imágenes que estáis adorando?' Ellos respondieron: "Encontramos a nuestros padres adorándolas". Él les dijo: "Ciertamente vosotros y vuestros padres habéis estado claramente errados".
Sin embargo, no hay un dictamen en el Corán que prohíba explícitamente la representación del profeta, de acuerdo a la profesora Mona Siddiqui, de la Universidad de Edimburgo. La idea vino de los hadices, las historias de la vida y dichos de Mahoma que fueron recolectados después de su muerte.
Siddiqui apunta a las representaciones de Mahoma, dibujadas por artistas musulmanes, que datan de la época de los imperios mongol y otomano. En algunas de ellas, las facciones de Mahoma están ocultas, pero se trata claramente de él.
"La mayoría de la gente dibujaba estas imágenes por amor y veneración, sin la intención de idolatría", dice Siddiqui.
¿En qué momento, entonces, se volvieron las imágenes de Mahoma haram, prohibidas?
Desafío a la colonización occidental
Muchas de las imágenes de Mahoma que datan de los años 1300 estaban destinadas a contemplarse en privado, para evitar la idolatría, le explica a la BBC Chrisitane Gruber, profesora de Arte Islámico de la Universidad de Michigan. "De alguna manera eran objetos de lujo, tal vez guardadas en bibliotecas para la élite".
Dichos objetos incluían miniaturas que mostraban personajes del islam.
La mayoría de estas imágenes se relacionan en particular al Viaje Nocturno y el Ascenso al Cielo
Gruber dice que la llegada de los medios impresos de circulación masiva, en el siglo XVIII, implicó un desafío. La colonización de algunos territorios musulmanes por fuerzas europeas y sus ideas también fueron factores significativos, añade.
La respuesta islámica fue hacer énfasis en la diferencia de su religión en contraste con el cristianismo, con su historia de iconografía pública, sostiene Gruber. Los retratos de Mahoma empezaron a desaparecer y una nueva retórica contra la representación pictórica empezó a emerger.
Pero el imán Qari Asim, de la mezquita Makkah de la ciudad de Leeds, una de las más grandes en Reino Unido, niega que hubiera un cambio significativo. Afirma que el efecto de los hadices, con sus mandatos contra cualquier imagen de seres vivientes, es automáticamente una prohibición a la representación de Mahoma.
Agrega que las imágenes medievales tienen que ser vistas en su contexto. "La mayoría de estas imágenes se relacionan en particular con el Viaje Nocturno y el Ascenso al Cielo. Hay un carnero y un caballo. Él está montado en el caballo o algo por el estilo".
"Los sabios clásicos han condenado enérgicamente esas representaciones también. Pero todavía existen".
Cambios
Uno de los puntos clave es que no hay retratos sencillos de Mahoma. Asim también sostiene que el tema de muchas de las imágenes no es claro. Hay dudas sobre si todas estas representaciones realmente intentaban representar al profeta o un compañero presente en la misma escena, sugiere.
El profesor Hugh goddard, director del Centro Alwalled para el Estudio del Islam en el Mundo Contemporáneo de la Universidad de Edimburgo, afirma que ha habido un cambio.
No hay unanimidad en ninguna de las fuentes fundamentales, ni el Corán ni los hadices
"No hay unanimidad en ninguna de las fuentes fundamentales, ni el Corán ni los hadices. La comunidad musulmana posterior tiende a tener puntos de vista diferentes sobre ésta y otras interrogantes.
El erudito árabe Mohammed ibn Abd al Wahhab, cuyas enseñanzas allanaron el camino del wahabismo, la versión dominante del islam sunita en Arabia Saudita, fue una figura clave.
"El debate se ha tornado mucho más enérgico, en particular cuando está asociado con el movimiento de Mohammed ibn Abd al Wahhab. Surgió la sospecha de veneración de cualquier cosa aparte de Dios. Incluido el profeta".
"Definitivamente ha habido cambios significativos en los últimos 200 años, tal vez los últimos 300″.
La situación es diferente con la escultura u otro tipo de representación tridimensional, observa Goddard, donde la prohibición siempre ha sido más clara.
¿Prohibición absoluta?
Para algunos musulmanes, dice Siddiqui, la aversión a los retratos se ha extendido incluso al rechazo a tener retratos de cualquier ser viviente, humano o animal, en sus casas.
Mahoma y los otros profetas son, de acuerdo a la fe islámica, individuos infalibles, modelos ejemplares y, por ende, no pueden ser representados de ninguna manera que les pueda causar irrespeto
La prohibición contra la representación pictórica no se difundió en todas partes, sin embargo. Muchos musulmanes chiitas parecen tener un punto de vista diferente.
Retratos contemporáneos de Mahoma todavía se encuentran en algunas partes del mundo musulmán, según Hassan Yousefi Eshkavari, un exclérigo iraní radicado ahora en Alemania. Según le comentó a la BBC que hoy en día, hay imágenes de Mahoma cuelgan en muchos hogares iraníes: "Desde un punto de vista religioso, no hay prohibición. Estas imágenes existen tanto en almacenes como en casas. No se interpretan como insultantes, ni desde una perspectiva religiosa ni cultural".
Las diferencias en cómo los musulmanes abordan la situación se da a lo largo de la división chiita-sunita, pero Gruber asegura que aquellos que sostienen que siempre ha habido un veto histórico están equivocados.
Es un argumento que muchos musulmanes no aceptarían.
"El propio Corán no dice nada", le dijo a la BBC el doctor Assam Tamimi, exdirector del Instituto de Opinión Política Islámica, "pero todas las autoridades islámicas aceptan que el profeta Mahoma y otros profetas no pueden ser dibujados ni reproducidos en retratos porque son, de acuerdo a la fe islámica, individuos infalibles, modelos ejemplares y, por ende, no pueden ser representados de ninguna manera que les los pueda irrespetar".
Tampoco lo convence el argumento de que si existen representaciones medievales de Mahoma quiere decir que no hay un veto absoluto.
"Aún si fuera así, sería condenado por las autoridades del islam".