¿Será Ison el cometa del siglo?

Si tenemos suerte, en sólo unos pocos días podremos disfrutar de una de las visiones más espectaculares del cielo nocturno en toda una generación. Los astrónomos esperan que el 3 de diciembre el cometa Ison aparezca en el horizonte hacia el este. Si eso ocurre, durante todo el mes de diciembre millones de personas alrededor del hemisferio norte podrán ver cómo se extiende su cola, que tiene varios millones de kilómetros de longitud, a través del cielo justo antes del amanecer.
Esta imagen del cometa fue obtenida en abril pasado por el telescopio Hubble.
Tres escenarios para Ison
El destino que le espera puede tomar tres caminos diferentes, de acuerdo a Matthew Knight, del Observatorio Lowell de Arizona, Estados Unidos, quien ha venido observando al cometa durante el último año:- Desintegración: podría acabar como el cometa Lovejoy, que rodeó al sol en 2011. La gravedad del astro atrajo un lado del núcleo del cometa más que otro, y lo dividió. Cuando Lovejor emergió de la corona solar, explotó. ¿Podría ocurrirle a Ison? Depende de su tamaño. Un núcleo de menos de 2 km corre un riesgo enorme. Los astrónomos estiman que el de Ison es de casi exactamente 2 km, así que está justo en el límite.
- Pérdida de la cola, brillo y masa: podría comportarse como el cometa Encke, también conocido como Matusalén por su avanzada edad cometaria (105 años), que ha orbitado alrededor del Sol unas 70 veces desde que fuera observado por primera vez en el siglo XVIII. Este cometa ya no tiene cola, y ha perdido rápidamente su masa y se está apagando. Los científicos creen que para 2050-2060 dejará de ser cometa para convertirse en un simple asteroide. Aunque Ison se acercará al Sol sólo una vez, Knight cree que podría sufrir el mismo destino.
- Supervivencia: hay un tercer escenario posible –el que mucha gente espera– y es que ocurra lo que mismo que con el cometa Ikeya Seki en 1965. Cuando éste atravesó la corona solar, el calor incendió los gases en su núcleo profundo y unos días después emergió de la capa externa del Sol con una inmensa cola detrás. Millones de personas observaron maravilladas el gran espectáculo.
Los secretos de un cometa
Si Ison desplegara algo semejante al Ikeya Seki, además de la fascinante visión ofrecería a los científicos la oportunidad de responder algunas de las grandes preguntas sobre el origen del universo, ya que los telescopios y la tecnología para capturar imágenes han avanzado muchísimo desde 1965.Esta foto fue tomada el 19 de noviembre desde el centro Marshall en Nuevo México.
Noticias relacionadas