El laboratorio de propulsión Jet de la NASA hizo un seguimiento de las deformaciones de la tierra donde se encuentra el Monte Etna entre 1992 y 2001.

Esta animación, hecha con los datos de radares satelitales, empieza con una erupción lateral ocurrida en marzo de 1993 que hizo que el volcán, que se encuentra en Sicilia, Italia, se desinflara.

En los dos años siguientes, hubo un período de inflación hasta que se reanudó la actividad en 1995.

El magma de este volcán se siguió acumulando hasta que en 2001, 2002 y 2003 se registraron erupciones más grandes.