El nuevo modelo, diseñado por la Asociación Sociológica Británica, incluye siete categorías que van desde la élite hasta lo que los investigadores llaman el "precariato" -una combinación de "proletariado precario"- que incluirá a los más pobres y con más privaciones en el país.
Según los investigadores las tres clases tradicionales son anticuadas, y sólo el 39% de la población en el país puede incluirse en ellas.
Las nuevas clases sociales británicas son: élite, clase media establecida, clase media técnica, nuevos trabajadores pudientes, clase trabajadora tradicional, trabajadores emergentes de servicio y precariato.
La nueva clasificación está basada en el llamado Sondeo Británico de Clases, el mayor estudio sobre clases sociales, en el que participaron más de 160.000 personas y que fue coordinado por la BBC.
Históricamente las clases sociales se han definido por la ocupación, riqueza y educación de un individuo.
Pero este estudio argumenta que estas categorías son demasiado simplistas y sugiere que la clase social tiene tres dimensiones: económica, social y cultural.
De élite a precariato
Para el nuevo modelo los investigadores midieron capital económico: ingresos, ahorros y valor de las casas, y capital social: el número, empleo y estatus social de las personas que el individuo conoce.
También se analizó el capital cultural, definido como la extensión y naturaleza de los intereses y actividades culturales.
Según los investigadores aunque el grupo de la élite ya había sido identificado anteriormente, ésta es la primera vez que se le coloca en un análisis más amplio de la estructura de clases, ya que normalmente se le ubica en el rango de los profesionales y gerentes.
Y en el extremo opuesto está el precariato -el grupo con mayores privaciones del país- que según el sondeo está formado por 15% de la población británica.