Manifestación pidiendo la libertad de los secuestrados.

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Antes de que se confirmara su muerte, los familiares de los empleados de El Comercio secuestrados habían decidido identificarlos para "sensibilizar a sus captores".

"Paúl Rivas Bravo, 45 años, fotógrafo. Javier Ortega Reyes, 32 años, periodista. Efraín Segarra Abril, 60 años, conductor".

Ellos eran los tres empleados del diario ecuatoriano El Comercio secuestrados cerca de la frontera con Colombia el 26 de marzo, en el más reciente episodio de violencia que afecta esa zona del departamento de Esmeraldas.

Este viernes 13 de abril, el presidente de Ecuador, Lenín Moreno, confirmó la muerte de los tres miembros del equipo periodístico.

"Tenemos información que confirma el asesinato de nuestros compatriotas. Parecería que los criminales nunca quisieron regresarlos sanos y salvos", afirmó el mandatario en conferencia de prensa desde Quito.

Según sus familiares, los tres profesionales fueron retenidos "mientras realizaban una cobertura periodística sobre las condiciones de vida de los pobladores que habitan en esta zona, en la que en los últimos meses se han registrado varios atentados con explosivos".

Inicialmente su identidad se manutuvo en secreto "por recomendaciones oficiales y para garantizar la seguridad y buen avance de las investigaciones", explicaron en un comunicado sus familiares.

"No obstante, cuando han transcurrido siete días desde la confirmación de su secuestro consideramos que es prudente terminar con ese sigilo y darle un nombre y un rostro a nuestros seres queridos", habían dicho en Quito al momento de identificarlos, una semana después del secuestro.

Según El Comercio, Ortega, Rivas y Segarra estaban trabajando en el tema desde el pasado 27 de enero, cuando la explosión de un coche bomba destruyó el comando policial de San Lorenzo.

La última vez que fueron vistos en libertad fue a eso de las 9:30 a.m del pasado 26 de marzo, cuando el equipo periodístico se acercaba a la población de Mataje, cerca de donde también se han producido ataques atribuidos a disidentes de las FARC vinculados al tráfico de cocaína.

Ruinas por el atentado de San Lorenzo

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La zona ha sido escenario de varios ataques, atribuidos a un grupo de disidentes de las FARC liderados por Walter Arisala Vernaza, mejor conocido como "Guacho".

"Los tres se internaron en esa población luego de ser revisados y registrados por los militares, cuyo último punto de control está a 1,5 kilómetros de distancia del pueblo", había informado el periódico ecuatoriano.

"Poco antes, se habían comunicado con la Redacción de este Diario para coordinar su trabajo (…). Pero la tarde de ese lunes, los intentos de comunicación fueron nulos. Alrededor de las 19:30, personal de Inteligencia se contactó con este Diario, para informar sobre un posible secuestro", detallaba también El Comercio.

"Nos faltan 3″

Las autoridades inmediatamente organizaron un comité de crisis y el plagio fue confirmado oficialmente por el ministerio del Interior el 27 de marzo.

En ese momento las autoridades también dijeron haber tenido un primer acercamiento con los captores y aseguraron que los secuestrados se encontraban en buen estado de salud.

Manifestación pidiendo la libertad de los secuestrados.

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La muerte de los empleados de El Comercio fue confirmada por el presidente de Ecuador, Lenín Moreno.

Las manifestaciones de solidaridad pidiendo la liberación de los secuestrados no se hicieron esperar, con comunicados y manifestaciones agrupándose en torno a la etiqueta #nosfaltan3, la que también figuraba en el comunicado con el que fueron identificados.

"Diversos protocolos internacionales establecen que, en estos casos, la visibilización de las víctimas es una medida importante para reducir su vulnerabilidad y eso es lo que hoy buscamos, que sus captores se sensibilicen sabiendo que tienen familias y amigos que los esperan todos los días y que no descansarán hasta que vuelvan a sus hogares sanos y salvos", habían explicado los familiares mientras los profesionales estaban en cautiverio.

"A quienes tienen retenidos a Paúl, Javier y Efraín queremos pedirles que nos devuelvan a nuestros hijos, a nuestros padres, a nuestros hermanos, a nuestros nietos, a quienes amamos profundamente", se leía también en el comunicado.

Manifestación pidiendo la libertad de los secuestrados.

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Las muestras de solidaridad se habían agrupado alrededor de la etiqueta #NosFaltan3.

El mayor de los secuestrados, Efraín Segarra, de 60 años, tenía dos hijos. Sus amigos y colegas también destacan el profundo amor por los animales del conductor de El Comercio, diario en el que trabajaba desde hace 16 años.

Mientras que a Javier Ortega, de solamente 32 años, y descrito como un apasionado del fútbol "sensible al dolor de todos los sectores sociales", lo esperaban su padre y sus dos hermanos.

El joven redactor, quien creció en España, llevaba ocho años en El Comercio, lo que convertía al fotógrafo, Paúl Rivas, en el decano del grupo, con 20 años como fotógrafo en el diario.

En 2013 Rivas obtuvo el Premio Nacional de Periodismo Eugenio Espejo, otorgado por la Unión Nacional de Periodistas de Ecuador (UNP), gracias a un fotoreportaje sobre los desaparecidos ecuatorianos.

¿La mano de Guacho?

El principal sospechoso de los ataques en la zona fronteriza de Esmeraldas es Walter Arisala Vernaza, mejor conocido como "Guacho", un exguerrillero de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), de origen ecuatoriano.

"Guacho" también es buscado por las autoridades colombianas, que están ofreciendo una recompensa de 300 millones de pesos colombianos (poco más de US$100.000) por su captura.

Ministro del Interior de Ecuador, César Navas.

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Las autoridades manejaron las investigaciones con suma reserva.

A Arisala se lo describe como un disidente de las FARC que se apartó de esta organización a raíz del proceso de paz para formar un grupo criminal integrado por unos 50 hombres, aunque algunos estiman su fuerza actual en unos 250 efectivos.

La banda liderada por este experto en explosivos -bautizada con el nombre de "Frente Oliver Sinisterra" en honor a un fallecido cabecilla de las FARC- no es el único grupo armado ilegal que opera en la convulsa zona de frontera.

*Esta nota fue publicada originalmente el 2 de abril y actualizada luego de que se confirmara la muerte de los tres secuestrados.


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