No ha pasado ni una semana desde que el colombiano Nairo Quintana conquistó el segundo lugar del Tour de Francia y ya se está preparando para una nueva carrera.
Este sábado, el ciclista participará en la Clásica de San Sebastián y aunque -como le contó a BBC Mundo- está agotado física y mentalmente, tiene en la mira el Mundial de Ciclismo de Italia que se disputará en septiembre.
El joven de 23 años se ha convertido en el nuevo ídolo del ciclismo colombiano tras coronarse además campeón de la montaña y de los jóvenes en el Tour de Francia.
Quintana ha unido su nombre al de grandes ciclistas colombianos como Lucho Herrera, Fabio Parra, Nelson Rodríguez, Félix Cárdenas, Santiago Botero y Mauricio Soler.
Muchos se preguntan ¿qué tienen los colombianos que se destacan en ese deporte? ¿Es genética, clima, geografía? o ¿el popular sancochito de gallina, como el que la madre de Quintana le prometió a su regreso?
"No sé si tenemos algo especial. Vivimos en altitud y quizás eso nos da una genética especial y una ventaja natural sobre el resto. Y tenemos mucha tradición ciclista. En Colombia el ciclismo es uno de los deportes más seguidos. Parece que el ciclismo colombiano resurge ahora, pero además de la época de los 80, luego ha habido ciclistas de primer nivel como Mejía, Rincón, Botero o Mauricio", le señaló Quintana a BBC Mundo.
Pero, para el ciclista del equipo español Movistar Team, hay un factor clave: la gran afición de los colombianos por el ciclismo.
"Sentir el calor de todo un país también hace que nos sacrifiquemos un poco más", indicó Quintana.
Su actuación en el Tour de Francia confirmó que el ciclismo colombiano está de regreso entre los grandes. Quintana ocupa la cuarta posición en la clasificación de la Unión Ciclista Internacional.
Italia
En 2010, con apenas 20 años, Quintana conquistó el Tour del Porvenir, una prestigiosa carrera francesa para menores de 25 años
Un día antes de responder las preguntas de BBC Mundo, Quintana había dicho que en un par de años podía ganar el Tour de Francia.
"En un poco más de dos años, podré ganar el Tour. No estoy lejos de conseguirlo. Debo mejorar muchas cosas, entre ellas la contrarreloj, los movimientos de la carrera, y hay que tener mucha madurez", había dicho el deportista.
Sin embargo, sus metas son más bien inmediatas.
"Ahora mismo sólo pienso en descansar un poco porque estoy agotado física y mentalmente. El Tour desgasta mucho a todos los niveles. De momento, el sábado me espera San Sebastián, que es una competencia del calendario World Tour y que es importante para el equipo y después ya iremos viendo el resto", le dijo Quintana a BBC Mundo.
Pero aclaró que al final de esta temporada también le "hace mucha ilusión" el Campeonato del Mundo que se disputará en Toscana.
De hecho, la Federación Colombiana de Ciclismo informó que Quintana y Rigoberto Urán, medalla de plata en Londres 2012 y subcampeón del Giro de Italia, encabezarán la delegación colombiana en Italia.
Orígenes
"Mucha gente de fuera siempre que piensa en Colombia lo hace en pobreza y en delincuencia. Y no es así"
Nairo Quintana
Quintana es originario de Cómbita, un pequeño municipio a 3.000 metros de altitud. Su historia con la bicicleta comenzó cuando viajaba casi 40 kilómetros de curvas y pendientes todos los días para asistir a la escuela.
Asegura haber tenido una infancia sencilla, en la que no tenía para darse lujos y en la que la invalidez de su padre, a causa de un accidente, lo enseño "a luchar".
Varios medios de comunicación colombianos e internacionales han destacado lo que califican como su origen humilde. Sin embargo, Quintana ha sido enfático al señalar que le "choca" que se diga que su familia era pobre.
"Mucha gente de fuera siempre que piensa en Colombia lo hace en pobreza y en delincuencia. Y no es así. Pese a venir de una familia humilde, como dice nunca me faltó de nada, pero afortunadamente nuestro padre nos inculcó que hay que sacrificarse para tener las cosas. Él tiene una minusvalía física y pese a todo siempre trabajó y se sacrificó por nosotros", indicó el ciclista.
Contra el dopaje
Por años, el ciclismo y el Tour de Francia se han visto ensombrecidos por los escándalos de dopaje. Reconstruir la confianza en ese deporte se ha convertido en una labor no sólo de deportistas sino de las autoridades de esa disciplina.
Ante la pregunta de cómo se puede reconstruir esa confianza dentro y fuera del ciclismo, Quintana es conciso:
"Creo que se está haciendo mucho para ello y que el camino que ha tomado el ciclismo es el correcto".
Sin embargo, como en todo deporte, la tentación de usar sustancias prohibidas para mejorar el rendimiento puede ser extremadamente fuerte y el panorama se vuelve aún más confuso cuando se escuchan declaraciones como las del estadounidense Lance Armstrong, quien una vez despojado de sus títulos, dijo que es imposible ganar el Tour de Francia sin dopaje.
¿Qué les dirías a los ciclistas que están comenzando sus carreras para que se mantengan alejados de esa tentación y entiendan que sí se puede ganar limpiamente?
"Creo que las generaciones actuales ya están concienciadas de que este debe ser el camino. Hay caminos más cortos que se han demostrado que al final no conducen a nada", indicó el nuevo rey de las montañas francesas.