La mujer se plantó frente a la tanqueta o "rinoceronte", como llaman a ese vehículo antidisturbios en Venezuela, y no se movió a pesar de que le lanzaban gas lacrimógeno.

Llevaba una bandera venezolana atada al cuello, una gorra con los mismos colores y una mochila.

Nada más. Ni un casco, ni una máscara. Mucho menos una bomba molotov.

Y no tenía más que una toalla para cubrirse la nariz de rato en rato y así aguantar los efectos del gas lacrimógeno un poco más.

"Valiente", "heroica", "una esperanza".

Así calificaron miles de usuarios de redes sociales a la señora de edad avanzada que impidió el paso del "rinoceronte" e incluso lo obligó a retroceder unos metros, dejando atónitos por un momento tanto a manifestantes como a policías.

Todavía no se sabe quién es la mujer cuyas fotos y videos frente a una tanqueta recuerdan inevitablemente a la imagen del hombre frente a una columna de tanques el 5 de junio de 1989, durante las protestas de la Plaza de Tiananmén, en Pekín, la capital de la República Popular China.

Al igual que en aquel episodio, las instantáneas de la mujer ante el "rinoceronte" dieron la vuelta al mundo y se han convertido en la imagen de las protestas en contra del gobierno de Nicolás Maduro en Venezuela.

Lo que se sabe

La escena se registró durante una de las manifestaciones convocadas en contra el gobierno del presidente Nicolás Maduro, paralelas a otras oficialistas, en una jornada que dejó tres muertos -dos civiles y un guardia nacional- por herida de bala.

El incidente ocurrió en la autopista Francisco Fajardo, en el centro de la capital venezolana, y varios fotógrafos que la presenciaron le contaron a BBC Mundo qué fue lo que sucedió.

Según uno de ellos, la mujer participaba en la marcha opositora con actitud pacífica y estaba muy cerca de los efectivos de seguridad.

"En algunos momentos se mantuvo fija frente a los oficiales, quienes intentaron quitarla con agua a presión. Otros manifestantes intentaron llevarla a resguardo y tampoco obtuvieron resultado", explica el fotógrafo.

Fue al retirar las paredes metálicas de los camiones de la Guardia Nacional Bolivariana para dar paso a las tanquetas cuando la manifestante decidió dar un paso al frente y colocarse ante ellas, dice.

"El oficial que conduce el blindado la empujó suavemente con la intención de que se moviera, mientras el otro, que maniobraba el arma para lanzar gas lacrimógeno, le arrojó un cartucho de gas, ambos sin efecto", añade.

"Cada vez que la tanqueta retrocedía para esquivarla, ella avanzaba", dice otro fotógrafo que registró la escena, en la que se ven numerosas piedras en el pavimento.

"Alguien de prensa intentó convencerla para que se apartara. Se negó", agrega, y asegura que "por momentos estaba muy afectada por los gases".

En una de las imágenes que circulan en las redes sociales se la ve cubrirse los ojos y la nariz con un trapo, de espaldas a la tanqueta, entre los gases lacrimógenos.

¿Detención?

Fotos y videos posteriores al episodio de la tanqueta, con la mujer sobre una moto con dos policías alejándose dispararon las alertas sobre una eventual detención de la señora.

En esas imágenes se la ve ya sin la gorra, con su pelo corto y canoso a la vista y la misma mochila estampada que portaba frente a la tanqueta.

No está claro si la detuvieron o si ya fue liberada después de marchar en la moto policial.

Ninguna entidad gubernamental o policial confirmó el eventual arresto.

BBC Mundo se puso en contacto durante todo el jueves con el Foro Penal Venezolano, una organización no gubernamental conformada por más de 200 abogados y que asiste a detenidos y a víctimas de violaciones de abusos, sin embargo allí señalaron que no se tienen datos relacionados con la mujer.

Sin embargo, la locutora y animadora de televisión venezolana Karen Ferreira publicó dos mensajes en su cuenta de Instagram en los que dijo que conocía la identidad de la mujer y que se encontraba bien y en su casa.

Ferreira aseguró que la señora es vecina de su abuela y es de origen portugués.

"No puedo dar detalles de sus datos personales por proteger su identidad y seguridad. No aceptó entrevistas en medios de comunicación, ni busca mucho menos fama", escribió Ferreira.

"En sus declaraciones contó que se encomendó a Dios porque sabía que la protegería y que su lucha es por volver a tener el país maravilloso que consiguió ella y sus padres cuando emigraron de Portugal", agregó.

Reacciones

Un día después del episodio, millones de usuarios compartieron imágenes de la mujer preguntando por su nombre, elogiando su actitud o reprochándola.

"Así es nuestra mujer venezolana, ¡valiente! Dios la bendiga, señora hoy y siempre", publicó uno de los líderes opositores Henrique Capriles Radonski.

Sin embargo, en foros venezolanos como en la página de Facebook del diario El Nacional, también se registraron voces contrarias a la actitud de la mujer con calificativos como "irresponsable" o "golpista".

La reprocharon por ser parte de "los escuálidos" y también por "buscar protagonismo" al salir al encuentro de una tanqueta de manera "irresponsable".

A favor o en contra, la pregunta de miles sigue siendo quién es ella y, pese a la enorme cantidad de rumores, todavía no hay nada cierto sobre su identidad más allá de su rostro registrado en las cámaras.

Luis V., uno de los miles que comentó en redes sociales al respecto opina que es mejor no se sepa de quién se trata.

"No es bueno decir su nombre. Para que no la persigan. Mejor es llamarla la Señora Libertad".