El rojo, amarillo y verde de la bandera de Bolivia pintó la caravana del rally Dakar en un día histórico para el país sudamericano, que por primera vez acoge cinco etapas de la considerada prueba de automovilismo más difícil y exigente del mundo.
Y el contacto con tierras bolivianas coincidió con el primer triunfo de ese país en una etapa del Dakar, el de Walter Nosiglia, quien se impuso el jueves en la categoría de cuadriciclos en el recorrido de la entre San Salvador de Jujuy en Argentina y Tupiza, en Bolivia.
El presidente Evo Morales se hizo eco de la hazaña que fugazmente ilusionó a los aficionados.
Pero él mismo fue el encargado de mostrar la otra cara de los deportes a motor cuando tuvo que informar del abandono de Nosiglia durante los primeros kilómetros de la etapa del viernes por un problema mecánico.
Tras la etapa de este viernes entre Tupiza y Oruro, la prueba se dirigirá a La Paz el sábado, donde se celebrará el día de descanso el domingo.
Luego rodará hasta Uyuni y regresará a territorio argentino el próximo martes.
El Dakar finalizará el 14 de enero en Buenos Aires.