La paz y el reciente acercamiento de las dos Coreas: ese fue el epicentro de la ceremonia de inauguración de los Juegos Olímpicos de Invierno de PyeongChang 2018.
Los juegos se celebran en la ciudad surcoreana de Pyeongchang hasta el 25 de febrero.
En el plano político, el acercamiento fue escenificado por la imagen de la jugadora norcoreana de hockey sobre hielo Hwang Chung-gum y el piloto surcoreano de bóbsled Won Yun-jong, quienes portaron la "bandera unificada".
A cuatro manos, los Hwang y Won desfilaron con la bandera blanca con la silueta de la península coreana en azul, seguidos de más de un centenar de deportistas que desfilaron entusiasmados.
Esta aparición de los dos países, partidos desde 1945 y técnicamente aún en guerra, desató una sonora ovación de los 35.000 espectadores que llenaron el estadio olímpico.
Era una estampa que no se veía en unas Olimpiadas desde Turín 2006.
Y se completó con una puesta en escena en el estadio olímpico de "Arirang", la canción tradicional coreana por excelencia que es considerada el himno no oficial de los dos países y que narra la dramática historia de dos amantes que han sido separados.
Pero la aproximación de ambos países tuvo su momento también en el plano político, cuando el presidente de Corea del Sur, Moon Jae-in, se acercó a saludar a Kim Yo-jong, la hermana del líder norcoreano Kim Jong-un.
Aunque estas no fueron las únicas imágenes que dejó la ceremonia. Estas son algunas de las mejores.
