Corea del Norte y Corea del Sur aceptaron reabrir la zona industrial conjunta de Kaesong la próxima semana, dijeron este martes funcionarios en Seúl.

Ambas partes establecieron la fecha del 16 de septiembre, después de conversaciones que se extendieron toda la noche, según el Ministerio de Unificación de Corea del Sur.

Las operaciones en el complejo se detuvieron en abril, cuando el Norte retiró a sus trabajadores en medio de la tensión binacional y con Estados Unidos.

El parque industrial, ubicado en el lado norcoreano de la frontera, alberga 123 fábricas surcoreanas que emplean a más de 50.000 norcoreanos.

Es el último proyecto coreano conjunto en funcionamiento y una fuente clave de ingresos para el gobierno de Pyongyang.

El mes pasado, el Ministerio de Unificación señaló que se había llegado a un acuerdo de cinco puntos sobre la reapertura del complejo.

Los propietarios de los negocios surcoreanos en la zona exhortaron a un arreglo y Corea del Norte dijo que reabrir Kaesong es de interés para las dos naciones.

Prueba nuclear

Este martes fue la segunda reunión de este mes entre representantes de los gobiernos de Seúl y Pyongyang, con un nuevo comité de funcionarios formado el pasado 14 de agosto, cuando ambos lados decidieron reabrir Kaesong después de más de cuatro meses de cierre.

Hasta mediados de julio pasado, cuando comenzaron una quinta ronda de conversaciones, las delegaciones se empantanaron en recriminaciones y adjudicación de responsabilidades sobre las causas de la crisis de principios del año, cuando Pyongyang realizó una tercera prueba nuclear.

Corea del Norte reaccionó airadamente al refuerzo de sanciones impuestas por Naciones Unidas después de dicha prueba y por los ejercicios militares conjuntos de Estados Unidos y Corea del Sur. Incluso llegó a considerar el cierre definitivo del complejo.

Corea del Sur asegura que la parálisis de Kaesong ha generado pérdidas por US$1.000 millones a sus empresas.

Delegación surcoreana se dirige a Kaesong

Las negociaciones se prolongaron durante la noche.

Kaesong es considerado una de las principales fuentes de divisas para la economía norcoreana.

Seúl ya había dicho que estaba listo para retirarse definitivamente del proyecto suspendido, aunque una declaración conciliadora de Pyongyang, que prometió acceso total a Kaesong y garantizó la seguridad de todos los trabajadores surcoreanos allí, fue bien recibida por el Sur.

La semana pasada se reabrió la línea telefónica militar entre Norte y Sur, principal vía de contacto entre ambos países que permanecía cortada desde fines de marzo.

Kaesong aporta mano de obra barata a los inversores del Sur y divisas al Norte, cuyo gobierno retiene gran parte de los sueldos.

El complejo había funcionado con normalidad desde su puesta en marcha en 2004.

Ambos países buscan también reanudar otros proyectos conjuntos, como los reencuentros de familias separadas por la guerra.