El líder de Corea del Norte, Kim Jong-un, dio este martes por abandonada la desnuclearización que había prometido a Donald Trump y anunció la próxima presentación de una "nueva arma estratégica".
"Corea del Norte continuará desarrollando las armas estratégicas que necesita para defenderse hasta que se ponga fin a la política hostil de EE.UU.", dijo en un evento de celebración del fin de año.
Kim había establecido precisamente el final de 2019 como plazo par que el gobierno de Donald Trump relajara las sanciones económicas contra su país.
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El líder norcoreano declaró que la suspensión de las pruebas nucleares, una promesa que le hizo a Trump en el marco de dos años de negociaciones entre los dos países, ya no era "necesaria".
"El mundo será testigo de una nueva arma estratégica que será obtenida por Corea del Norte en el futuro cercano", dijo.
"Pondremos en alerta constante nuestro disuasivo nuclear, capaz de contener las amenazas nucleares del Estados Unidos y garantizar nuestra seguridad a largo plazo", añadió.
Sin embargo, no dio más detalles sobre los nuevos proyectos de defensa del país.
Durante los últimos meses Pyongyang ha estado pidiendo la flexibilización de las sanciones internacionales, pero Washington ha insistido en que se tomen medidas más concretas para desnuclearizar el país asiático.
Expertos estadounidenses en Corea del Norte anotaron que es probable que Trump responda a Kim con más sanciones, mayor presencia militar en el este de Asia y más amenazas.
Estados Unidos ya ha dicho que reaccionará proporcionalmente si Corea del Norte lleva a cabo una prueba de misiles de largo alcance.
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