Jacob Zuma en un discurso

Getty Images
El presidente Jacob Zuma asumió el cargo en mayo de 2009.

El presidente de Sudáfrica, Jacob Zuma, anunció este miércoles su renuncia a su cargo con "efecto inmediato".

La decisión del mandatario se produce después de que su partido, el Congreso Nacional Africano (ANC, por sus siglas en inglés), hiciera un llamado para que abandonara el poder.

El ANC pidió a Zuma su dimisión o de lo contrario enfrentaría un voto de desconfianza en el Parlamento el jueves.

Zuma, de 75 años, ha estado en el poder desde mayo de 2009. En los últimos meses enfrentó numerosas acusaciones de corrupción.

El mandatario hizo el anuncio de su dimisión al final de un largo discurso en el que dijo que no estaba de acuerdo con la forma en que el ANC había actuado en su contra.

Expresó que no tenía temor de una moción de confianza: "He servido a la gente de Sudáfrica lo mejor que he podido".

Dos hombres observan el mensaje televisado

AFP
El anuncio se dio cerca de la media noche del miércoles, el límite que le había dado el ANC a Zuma para hacerse a un lado.

También hizo público su desacuerdo con los dirigentes del ANC.

"No acepté gobernar para salir con pactos o beneficios de la oficina del presidente", subrayó. "No se debe perder ninguna vida en mi nombre y tampoco se debe dividir el ANC en mi nombre", añadió.

Luego del mensaje de Zuma, el ANC emitió un comunicado en el que asegura que la renuncia del presidente brinda "certeza al pueblo de Sudáfrica".

Líderes del ANC se han pronunciado para que el vicepresidente Cyril Ramaphosa asuma la presidencia de Sudáfrica.

Hábil político

Jacob Zuma fue el presidente más controvertido que ha tenido Sudáfrica desde que se terminó el gobierno de la minoría blanca en 1994.

Su habilidad política le ha permitido sortear una serie de escándalos: la de este año era la novena ocasión en la que enfrentaba un voto de confianza en el Parlamento.

Jacob Zuma

AFP
Antes de ser presidente (2009-2018), Jacob Zuma fue vicepresidente (1999-2005) y presidente del ANC (2007-2017).

Incluso en el período previo a las elecciones de 2009 en las que resultó electo, Zuma enfrentó acusaciones de abuso sexual y corrupción.

Pero lo que no pudo quitarse de encima fueron las acusaciones de lavado de dinero y crimen organizado derivadas de un controvertido acuerdo de compra de armas por US$5.000 millones firmado en 1999 cuando era vicepresidente.

En 2017, el Tribunal Supremo sudafricano dictaminó que 18 cargos de corrupción por ese caso deberían ser vueltos a investigarse.

Él siempre negó los cargos y dijo que renunciaría si lo declaraban culpable.

La casa de Zuma en Nkandla

AFP
La remodelación de una propiedad en Nkandla con dinero público es uno de los casos que enfrentó Zuma.

En 2016 fue acusado de usar dinero del gobierno para reformar una casa suya en Nkandla, en un caso por el cual reintegró el monto de las obras.

Zuma también sigue la tradición zulú de la poligamia y actualmente tiene cuatro esposas.

Se casó seis veces y tiene 21 hijos.