Una explosión frente a la embajada de EE.UU. en la capital turca, Ankara, dejó al menos dos personas muertas.

Agencias de noticias informan que la explosión pudo ser producida por un ataque suicida.

Decenas de ambulancias y camiones de bomberos acudieron al lugar después de la explosión, en una zona donde se hospedan varias sedes diplomáticas.

Según la emisora turca NTV, la explosión no causó daños en el interior de la embajada estadounidense.

Ningún grupo se ha responsabilizado del ataque.

Historial

En declaraciones realizadas frente a la embajada, el embajador estadounidense en Turquía, Francis Ricciardone, dijo que murió un guardia de la embajada.

Ricciardone agradeció a las autoridades turcas por llegar al lugar del incidente de manera tan rápida, pero también expresó su tristeza por los afectados.

"Estamos muy tristes, por supuesto, por haber perdido a uno de nuestros guardias turcos"

Francis Ricciardone, embajador estadounidense en Turquía

"Estamos muy tristes, por supuesto, por haber perdido a uno de nuestros guardias turcos. Estamos muy tristes y rezamos para que la persona herida, también un ciudadano turco, se recupere rápidamente", dijo Ricciardone.

Un número de grupos ilegales que van desde los separatistas kurdos a militantes izquierdistas e islamistas han lanzado ataques en los últimos años en Turquía.

El último ataque de grandes magnitudes en Ankara, en 2007, dejó nueve personas muertas y 120 heridas.

Los investigadores policiales culparon en ese entonces a un atacante suicida de izquierda.

La embajada de Estados Unidos tiene altos niveles de seguridad. Está muy cerca de las embajadas de Alemania y Francia.