Sede de Petrobras

La policía rodeó la sede de Petrobras tras la renuncia de la cúpula directiva de la empresa.

La policía en Brasil está interrogando al tesorero del gobernante Partido de los Trabajadores (PT) en conexión con el escándalo que involucra a la gigante petrolera estatal Petrobras.

El tesorero del partido, Joao Vaccari Neto, no fue formalmente arrestado pero ha sido trasladado a una estación de policía para dar una declaración sobre donaciones al PT hechas por empresas que tenían contrato con Petrobras, según la procuraduría.

La medida sucede un día después de que la presidenta de Petrobras, Graça Foster, y cinco directivos de la petrolera renunciaran a sus cargos.

Los investigadores arguyen que compañías pagaron precios inflados para recibir contratos de Petrobras y que el dinero fue desviado al PT y sus aliados.

Graca Foster

La presidenta de Petrobras, Graça Foster, estuvo entre los ejecutivos que renunciaron.

Vaccari Neto ha negado cualquier vinculación con el esquema y el ministro brasileño de Relaciones Institucionales, Pepe Vargas, descartó que su comparecencia ante la policía sea un "constreñimiento" para el gobierno.

Sin embargo, los últimos hechos sugieren que el escándalo de Petrobras salpica más cerca de la presidenta brasileña, Dilma Rousseff.

Foster es amiga personal de Rousseff y, aunque no hay acusaciones contra ella, su abrupta renuncia al cargo obliga a la mandataria a elegir de apuro un sustituto como reclamaban hace tiempo sus críticos.

Y el nombre de Vaccari Neto suena en el caso Petrobras desde la campaña electoral que dio la reelección a Rousseff por un ajustado margen en octubre, pese a lo cual siguió siendo tesorero del partido gobernante.

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