Las imágenes son muy familiares. Un grupo de niños asustados abrazándose a una figura materna; el cuerpo de una víctimas cobijado en el sueño por una mujer; una familia huyendo con sus precarias pertenencias cargadas sobre sus cabezas.
Estas son escenas de la guerra en Siria pero han sido compuestas delicadamente por piedras.
Son creaciones del artista y escultor de 52 años Nizar Ali Badr, quien desde Siria sube las imágenes de sus criaturas a Facebook.
Cada pieza cuenta una historia y las escenas hechas de piedra parecen cobrar vida.
Nizar ha sido un apasionado del arte hecho de piedras desde hace décadas. Cada día, por los últimos 35 años, ha ido a la playa de Latakia para recolectar hermosas piedras y guijarros de todos los tamaños y formas.
La costa es parte de Jebel Aqra, también conocido como Monte Zaphon, una montaña de piedra caliza en la frontera turco-siria.
Cuando recolecta las necesarias, regresa a su estudio en la ciudad y comienza su trabajo. Él dice que ve la montaña como una fuente de inspiración.
Cuando el conflicto sirio comenzó en el año 2011, Nizar vio cómo las distintas tragedias se iban desencadenando: hogares destruidos, familias desplazadas, niños muertos.
Entonces comenzó a recrear lo que observaba en piedras.
En el pasado Nizar pegaba las pierdas en cartulinas pero luego el pegamento se volvió muy caro. Entonces comenzó a desmantelar sus propias creaciones.
"Apenas terminaba una pieza la observaba por un tiempo y luego la destruía para hacer otra".
Su forma de arte se volvió un medio para expresar las emociones y los temores que sentía por la noche, pero luego quiso compartir estos sentimientos con el mundo.
"Comencé a tomar fotos como la única forma que tenía de preservar las imágenes y lograr que la gente pudiera verlas", dice.
Nizar ha creado más de 25.000 escenas del día a día de la guerra desde 2011.
Nunca ha vendido ninguna de ellas, no es su intención sacar provecho de estas creaciones.
"Antes que nada soy un ser humano. El conflicto me ha causado mucho dolor y a veces no puedo dormir por la noche", cuenta.
Y añade: "Mi único consuelo es mi trabajo y por lo tanto no lo veo como una fuente de ingresos. Es pura pasión por el arte hecho en piedra. Quiero comunicar las emociones que toda la gente en el mundo comparte, como amor, esperanza y tristeza".
Nizar explora diferentes temas a través de sus creaciones pero uno en particular ha llamado su atención: el exilio de los sirios.
"Cuando veo todas esas familias obligadas a dejar sus hogares siento pena. ¿Por qué alguien tendría que ser forzado a dejar su hogar?
Él dice que a través de su arte, trata de mostrar los sacrificios que sufre la gente y los riesgos que corre para escapar de la guerra y la persecución.
Muchas de sus imágenes ilustran familias y niños porque su intención es conjugar las penurias de los más vulnerables y el peso de estar en movimiento.
La escritora canadiense Margriet Ruurs fue inspirada por el trabajo de Nizar e incluyó algunas de sus imágenes en su exitoso libro infantil Stepping Stones: A Refugee Family’s Journey ("Piedras paso a paso: el viaje de una familia refugiada").
El libro cuenta la historia de Rama y su familia, quienes se ven obligadas a dejar su pacífica villa para escapar de las miserias de la guerra que se acerca a su hogar.
Rama junto a su madre, padre, abuelo y hermano Sami huyen de Siria buscando otra vida en Europa y su travesía es contada a través del arreglo de las piedras.
El sueño de Nizar es realizar una exhibición de su trabajo en todo el mundo.
Su idea es donar cualquier ingreso a las personas afectadas por la guerra.
Mientras, continuará creando con sus piedras para llamar la atención de la gente sobre lo que ocurre en Siria.
Todas las imágenes son cortesía de Nizar Ali Badr.