El secretario de Defensa de Estados Unidos, Chuck Hagel, afirmó que su país creen que las fuerzas gubernamentales en Siria usaron armas químicas.

Hagel dio las declaraciones en una rueda de prensa en Abu Dhabi donde aseguró que funcionarios de inteligencia de EE.UU. determinaron con distintos grados de precisión que se usó gas sarín a pequeña escala.

Hagel aseveró que la comunidad de inteligencia aún evalúa la información, pero que necesita tener en la mano todos los hechos.

El presidente Barack Obama ya dijo que el uso de armas químicas generaría un cambio radical en la posición de EE.UU. frente a Siria.

Según el editor de la BBC en Washington, Marck Mardell, esta noticia crea un dilema real para el gobierno de Obama.

"Es obvio que quiere evitar una acción militar en Siria, la ve como muy compleja y muy difícil, con falta de objetivos. Sin embargo, también ha visto muy claro que el uso de armas químicas sería cruzar la línea roja".

John McCain, senador republicano y miembro del comité de inteligencia de la cámara alta del Congreso, ya acaba de indicar que se ha cruzado esa "línea roja".

"Asunto grave"

Aunque el secretario de Defensa Hagel se refirió al uso de armas químicas en Siria como "un asunto grave" y completamente "inaceptable", se abstuvo de catalogar el hecho como el cruce de la "línea roja" que significaría una intervención militar de Estados Unidos en el conflicto.

Hagel reiteró que todavía había incertidumbre sobre el tipo de químicos utilizados –muy probablemente el gas sarín- a qué escala y por quién específicamente. “Necesitamos confirmar todos los hechos”, señaló el secretario de Defensa.

Según informa el corresponsal de BBC Mundo en Washington, William Márquez, la Casa Blanca está tomando la situación muy seriamente y, esta mañana, envió una carta a varios miembros del Congreso con la evidencia que maneja. No obstante, el gobierno espera que los organismos de inteligencia hagan las exhaustivas investigaciones y evaluaciones antes de decidir cómo actuar.

Lo cierto es que la postura de Estados Unidos, tal como lo ha manifestado el presidente Barack Obama, es que el uso de armas químicas es algo que "cambia el juego" en Siria.