"El Brexit será fabuloso". Reino Unido "fue muy inteligente al salirse", dijo el presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, en una conversación con el parlamentario británico y ex ministro de Justicia Michael Gove, columnista también del diario The Times.
En la conversación con Gove, quien fue uno de los líderes de la campaña por el Brexit durante el referendo de 2016, Trump dijo que Reino Unido "está fantástico" tras el voto para salir de la Unión Europea.
Y prometió establecer un "rápido" acuerdo comercial entre ambos países cuando asuma su cargo el próximo viernes.
Durante la conversación, Gove le preguntó a Trump si Reino Unido estaba "al final de la fila" para lograr un acuerdo con Estados Unidos.
"Yo creo que ustedes están muy bien. Creo que (Reino Unido) está fantástico", respondió.
La pregunta se refería a los comentarios del presidente Barack Obama, en abril pasado, cuando dijo que Reino Unido pasaría al "final de la fila" si abandonaba la Unión Europea.
"Trump dijo que ocurriría el Brexit, y ocurrió", dijo el presidente electo. "Todos pensaron que yo estaba loco", agregó.
"Obama dijo: 'Se irán al final de la fila', y después se retractó de su declaración".
Y Trump continuó: "Los países desean su propia identidad y Reino Unido deseaba su propia identidad, pero pienso que si no se les hubiera forzado a aceptar a todos los refugiados ustedes nunca hubieran tenido un Brexit".
Y sobre un potencial acuerdo comercial entre Estados Unidos y Reino Unido, señaló: "Vamos a trabajar muy duro para hacerlo rápido y hacerlo apropiadamente".
Las declaraciones del presidente electo de Estados Unidos surgen un día antes de que la primera ministra británica, Theresa May, haga un discurso en el que se espera expondrá el enfoque que tomará la salida del país de la UE.
Varios medios han estado especulando que May podría tomar la línea del llamado "Brexit duro", que implica abandonar el mercado único europeo, además de tomar control sobre sus aduanas.
Ante los rumores, la libra esterlina cayó este lunes a su nivel más bajo en tres meses para colocarse debajo del nivel de US$1,20, para después recuperarse.
La moneda también cayó ante el euro en los mercados asiáticos, con una caída de más de 1% a cerca de 1,13 euros.