La mayoría de las religiones tienen algún tipo de relación especial con ciertos animales: muchas tienen dietas especiales; el Viejo Testamento, por ejemplo, enumera una serie de reglas alimenticias que todavía siguen varias religiones.
Pero la mayoría de los cristianos de hoy en día, a la hora de pensar en su dieta, sopesan más cuestiones económicas y de salud que teológicas.
Como suele suceder cuando se recurre a las escrituras para encontrar respuestas, las interpretaciones de lo que la Biblia dice de si los humanos deben comer otros animales o no, varían ampliamente.
David Grumett, profesor de Ética Cristiana de la Universidad de Edimburgo, confirma que no hay una única visión en la teología cristiana en lo que se refiere a comer animales.
Pero recomienda que si se come carne, se haga desde una perspectiva ética: "El animal debe ser bien criado. Debe tenerse conocimiento de cómo han sido tratados porque son regalos de Dios. Y cuando los sacrifican, debe ser con el menor dolor y sufrimiento posible", añade Grumett.
¿Qué dice la Biblia?
Pero otros religiosos tienen un punto de vista más radical. Por ejemplo, la profesora Corinne Painter, del Washtenaw Community College, cree que los cristianos tienen la responsabilidad de abstenerse de comer carne y cree que deberían seguir una dieta vegetariana.
"Los cristianos tienen un deber moral de comer alimentos que no sean el resultado de sufrimiento indebido, de un trato injusto o de una muerte prematura inducida a seres dotados de sentidos; deben estar claramente interesados en evitar el sufrimiento y en proteger sus vidas, que Dios claramente declaró que son valiosos", le dijo a la BBC.
Pese a esa interpretación de las escrituras, buena parte de los cristianos comen carne.
Un portavoz de la Iglesia de Inglaterra explicó que hay tres posiciones distintas sobre si la carne debería incluirse en el menú o no. Hay gente que se abstiene de comer carne por motivos éticos, mientras que otros lo hacen porque creen que es un mensaje que recoge la Biblia.
Pero es seguro creer, explican, que la visión de la mayoría es que "no hay objeciones teológicas a comer carne, teniendo en cuenta que Dios le dio al hombre el dominio del resto de lo que creó".
"En la Biblia comer carne se asume como algo normal y bueno", afirmó el portavoz.
Monjes vegetarianos medievales
Pero dejando las interpretaciones conflictivas aparte, hay una larga historia de cristianos que se abstienen de comer carne.
En la era medieval, había un complicado sistema de baquetes y ayunos, en el que se podía comer carne sólo en días determinados.
Los monjes la evitaban ya que se creía que llevaba a pensamientos impuros, lo que era un verdadero desafío cuando trataban de llevar una vida monacal. Sin embargo, sí que comían pescado.
El profesor Grumett ve una conexión con el presente de esas tradiciones del pasado: "Se puede ver a los monjes como los predecesores de los vegetarianos modernos en el sentido de que tenían una disciplina mucho más rigurosa en cuanto a la dieta que eligieron como parte de la vida que querían llevar".
Y hay ejemplos de vegetarianos cristianos en tiempos más recientes.
La ahora secular Sociedad Vegetariana, que fue pionera en ese ámbito, se creó originalmente en el seno de la Iglesia Cristiana de la Biblia a mediados del siglo XIX.
El movimiento no se extendió a otras congregaciones.
A juicio del profesor Grumett, la tendencia no tuvo una mayor aceptación en la Iglesia Cristiana por las excentricidades del fundador del movimiento, el reverendo Cowherd.
"Cowherd basó la creencia en algunas interpretaciones extrañas de la Biblia. Por ejemplo, pensaba que los sacrificios animales en el Viejo Testamento eran, en realidad, pieles de animales con fruta y vegetales dentro", explica.
Hacerse vegetariano
De la población británica en general, cerca del 2% sigue una dieta vegetariana.
Pese a que no hay estadísticas oficiales de cristianos vegetarianos o veganos, están representados por sociedadesy voces acreditadas.
La Asociación Cristiana Vegetariana del Reino Unido cree, según su manifiesto, "en promover una forma de vida que representa el buen servicio cristiano y es consistente con la creencia en Dios que creó, afirmó y redimirá a todas las criaturas".
Para el reverendo Andrew Linzey, que es teólogo del Centro de Ética Animal de la Universidad de Oxford, el mensaje de la Biblia al respecto es claro: "La gente siempre recuerda que se nos ha dado el dominio sobre los animales, lo que dice el capítulo 1 del Génesis, pero se olvidan de que dos versos más tarde se nos da una dieta vegetariana"
El profesor Linzey se refiere al versículo del Génesis 1:29, que dice que Dios le dio al hombre "todo árbol delicioso a la vista, y bueno para comer".
"Lo importante es que la dieta original dada por el Creador es vegetariana. Pese a que vivimos en un mundo caído y alienado, deberíamos al menos intentar aproximarnos a Dios haciéndonos vegetarianos".
"Dios le da la vida a los animales, su valor y dignidad. Donde vemos carne, deberíamos ver a una criatura con sentimientos a la que Dios ama", sostiene el reverendo.
Pero el profesor Grumett cree que es posible ser cristiano y comer carne, pero que es importante ser responsable de la procedencia de la carne con moderación.
"Ser vegetariano no es un requerimiento de la cristiandad, pero es la forma de la que algunos grupos de cristianos han sido llamados a vivir su vida cristiana".
La Iglesia de Inglaterra reconoce que este es un debate que se mantendrá en el tiempo, independientemente de si los cristianos se abstienen de comer carne por motivos teológicos o éticos, o si deciden quedarse con la mayoría y seguir comiéndola.