Para muchos es el héroe inmortalizado en la película "Hotel Ruanda", que relata los esfuerzos de un modesto hostelero por salvar a miles de tutsis del genocidio.
Pero, en un inesperado giro de la trama, desde inicios de esta semana Paul Rusesabagina fue arrestado en su país acusado de "liderar una organización terrorista".
Rusesabagina se desempeñaba como gerente provisional del hotel Milles Collines de Kigali, la capital del país, durante el intento de exterminio de los tutsis por parte de la gobernante mayoría hutu, en 1994.
El ahora activista de derechos humanos no dudó en utilizar su posición e influencia para ayudar a escapar a unos 1.200 tutsis y hutus moderados, como él, que buscaron refugio en su establecimiento.
Se estima que al menos 800.000 personas fueron violentamente asesinadas en lo que se conoce como el genocidio de Ruanda.
Y en 2005 el actor estadounidense Don Cheadle fue nominado al Oscar por su interpretación de Rusesabagina en "Hotel Ruanda". Sophie Okonedo tuvo también una nominación a mejor actriz de reparto por su papel de su esposa tutsi, Tatiana.
Rusesabagina ya llevaba años viviendo en el exilio: primero en Bélgica, donde obtuvo la nacionalidad, y luego en Estados Unidos, país del que también es residente.
Y, según su familia, a finales de la semana pasada se encontraba en Dubái, donde según su hija fue "secuestrado" por las autoridades ruandesas que hicieron pública su captura el lunes.
"No sabemos cómo llegó (a Ruanda) ni como pasó esto", le dijo Anaise Kanimba a la BBC.
"Por eso es que creemos que lo secuestraron, porque él nunca iría a Ruanda voluntariamente", explicó Kaninba, para quien las acusaciones contra su padre "carecen de todo fundamento".
Crítico del gobierno
Las autoridades ruandesas, por su parte, no han dado mayores detalles sobre la captura de Rusesabagina, más allá de destacar que la misma había sido posible gracias a la "cooperación internacional".
También dijeron que Rusesabagina, un conocido crítico del presidente ruandés Paul Kagame, será juzgado por terrorismo, asesinato, secuestro e incendio provocado.
Kagame, de etnia tutsi, es fundador de Frente Patriótico Ruandés (FPR), el grupo rebelde que en julio de 1994 puso fin al genocidio y se hizo con el poder.
Pero en 2007 Rusesabagina dijo que una corte internacional debería juzgar a algunos miembros del FPR por su supuesto rol en el genocidio.
Y cuatro años más tarde, en 2011, el antiguo hostelero fue acusado de financiar grupos subversivos.
En ese momento, Rusesabagina negó las acusaciones y no se presentaron cargos.
Pero más recientemente su nombre volvió a ser mencionado durante un juicio por terrorismo en el país africano, el que pude dar pistas sobre las justificaciones para su arresto.
En el juicio se aseguró que el grupo rebelde ruandés Frente de Liberación Nacional (FLN) había recibido ayuda por parte del presidente de Zambia, Edgar Lungu, a causa de su amistad con Rusesabagina.
Un vocero del presidente Lungu, sin embargo, negó las alegaciones en una entrevista con la BBC.
Los críticos del presidente Kagame, en el poder desde el año 2000, lo acusan de no tolerar ningún tipo de oposición.
De hecho, varios líderes opositores han sido encarcelados y otros se han tenido que marchar al exilio.
Kagame, sin embargo, asegura que lo único que está haciendo es tratar de evitar el regreso del odio racial.
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