El álbum "blindado" para que nunca se filtrara se filtró.
La semana pasada, decenas de blogs de tecnología reportaron que el esperado álbum de Kanye West, un reconocido rapero estadounidense, sería el primero en muchos años en no filtrarse antes de su lanzamiento.
Las extremas medidas de seguridad que West le puso a su sexto álbum como solista incluían no trabajar en estudios de grabación, no comunicarse vía correo electrónico con productores e ingenieros y no hacer copias de los archivos en computadoras sino en unos sofisticados discos duros que, según reportó la revista musical Billboard, "solo se podían acceder tras un filtro biométrico de huellas dactilares".
El álbum, sin embargo, se filtró el viernes, y muchos pudieron escucharlo antes de su lanzamiento oficial este martes.
Y una de las teorías es que fue West mismo quien lo filtró en internet y toda su parafernalia de seguridad era una estrategia para hacerle promoción a "Yeezus", una producción que en general ha sido bien recibida por la crítica musical.
Las filtraciones de los discos, en efecto, son un viejo fenómeno de internet, una tecnología que revolucionó la industria musical. A la historia pasaron discos filtrados como "American Life", de Madonna, en 2003, o "This Is Happening", de LCD Soundsystem, en 2010, cuyo cantante, James Murphy, se hizo famoso por haberse arrodillado en el concierto de lanzamiento para rogarles a los presentes que no lo filtraran.
Pero lo que muchos no se preguntan cuando reciben o descargan ese archivo ilegal es qué tuvo que pasar para que llegase a sus computadoras y reproductores de mp3.
En las redes

Muchas de las filtraciones se dan en los mismos estudios de música, por parte de ingenieros o productores.
Pero volvamos a Kanye West. Aunque aún no está claro quién fue el responsable de la filtración del álbum, y quizá nunca lo esté, hay varios datos -recogidos por el portal estadounidense de cultura popular BuzzFeed– que permiten hacerse una idea de cómo es que estos archivos secretos se cuelan en las redes sociales y los computadores de miles de personas.
El jueves por la noche, la lista de las canciones y unas fotos del álbum de West llegaron a Twitter a través de un portal llamado fistintheair.com, que en este momento está fuera de servicio.
Las fotos, en las que se veían unos discos ordinarios sin referencias y dentro de unas cajas transparentes y sellada, se volvieron virales.
Los mensajes llegaban de usuarios anónimos de Twitter con pocos seguidores, cuyos perfiles no son muy elaborados y están llenos de tuits y retuits que parecen spam.
Esto se dio en cuestión de segundos. A las 2 de la mañana del viernes las fechas de envío de los discos oficiales ya se habían reportado en los blogs de música y la noticia de la filtración se volvió viral.
Pero nadie había escuchado el álbum, hasta que a las 11 de la mañana el archivo llegó a sitios que hoy están fuera de servicio y a portales de intercambio de archivos y vínculos como 4chan y Reddit.
Según BuzzFeed, un sitio web llamado kanyetothe.com fue el que estuvo hospedando los archivos durante un tiempo hasta que, cuando ya estaban en manos de otros y reproduciéndose una y otra vez, los sacó de su portal, que luego quedó fuera de servicio.
Quién
Las filtraciones se dan de manera desordenada y, sobre todo en la era de las redes sociales, es muy difícil saber de dónde vienen.
"La prensa que reseña los discos es una fuente enorme, pero las filtraciones pueden venir de diferentes lugares", le dijo a la revista Time Terri Denver, que dirige la organización antipiratería Peer Media Technology.
Los álbumes pasan por decenas de personas antes de ser lanzados, no solo la banda, los productores y los ingenieros: hay diseñadores que ilustran las imágenes del proyecto, trabajadores en la planta de producción del disco, agentes que los mandan a colaboradores, ejecutivos comerciales en la firma musical, mensajeros que llevan las muestras de un lugar a otro.

James Murphy, de la banda electrónica LCD Soundsystem, se hizo famoso por rogarle a sus seguidores que no filtraran su disco.
"Cualquiera de ellos puede ser el culpable", anotó Denver.
¿Por qué lo hacen?
Como en el caso de Kanye West, muchos creen que cada vez es más probable que sean los mismos músicos quienes filtran el álbum para generar cobertura en los medios de tecnología.
Por ejemplo, el interés por el recién lanzado álbum de la banda francesa de música electrónica Daft Punk, "Random Memories Access", creció desmesuradamente por la manera como se filtró.
Primero, la banda mostró un fragmento de un minuto del video del primer sencillo del álbum, "Get Lucky", en un masivo festival musical en Estados Unidos, Coachela.
El video llegó a las redes sociales e innumerables versiones de la canción completa empezaron a surgir en las redes. Nadie sabía cuál era la versión real y la incertidumbre y el interés no hicieron más que crecer.
Días antes del lanzamiento oficial, el álbum completo se filtró a pesar del aparente hermetismo de la banda.
El álbum ha sido el segundo más vendido en su primera semana en 2013 y "Get Lucky" -la canción más reproducida en su primer día en la historia de la plataforma musical Spotify- lleva dos meses en los primeros puestos de las listas de las canciones más exitosas.
La filtración, pues, no parece haber afectado a Daft Punk. Al contrario.