El edificio londinense conocido como "Walkie-Talkie" es el presunto culpable. Y el delito, reflejar la luz que derritió partes de un automóvil estacionado en una calle cercana.

¿Pero qué fue lo que pasó? ¿Fue la luz del sol un cómplice necesario? ¿Cómo se puede evitar que el edificio "reincida"?

La BBC consultó al experto Chris Shepherd, del Instituto de Física en el Reino Unido, para entender mejor cuál es el fenómeno físico que explica este episodio.

Según Shepherd, es como encender un fuego con un espejo parabólico.

"Fundamentalmente se debe al reflejo. Si un edificio crea una curva con una serie de ventanas planas, que actúan como espejos, los reflejos convergen en un punto, concentrando la luz", explica el científico.

El Walkie-Talkie, un rascacielos de 37 pisos a medio terminar, es de hecho un edificio curvo. Su diseño es el responsable de su apodo, pero también ha sido comparado con un vaso de una pinta de cerveza.

El auto, un Jaguar, estaba estacionado en pleno centro financiero de Londres, justo en el punto de llegada de la luz reflejada y concentrada.

Pero esta no ha sido la única víctima. También se ha reportado los casos de un asiento de bicicleta quemado, del felpudo de una tienda chamuscado y de capas de pintura con ampollas.

Tropezones arquitectónicos

Edificio Walkie-talkie en Londres

Al rascacielos lo llaman Walkie-Talkie por su forma peculiar.

La empresa Land Securities, que construye el edificio junto al Grupo Canary Wharf, dice que está trabajando en una solución y que ha tomado la medida de emergencia de suspender los lugares de estacionamiento justo bajo el resplandor.

La compañía cree que el problema se debe a un fenómeno causado por la actual elevación del sol en el cielo. Se piensa que puede durar unas dos horas cada día y que podría ser un problema en las próximas dos o tres semanas.

¿Pero es común que un rascacielos pueda dañar coches o cosas de esta forma?

De acuerdo al experto en crítica arquitectónica Jonathan Glancey, esta historia tiene precedentes.

En 2003, la inauguración del auditorio Walt Disney en Los Ángeles, diseñado por el arquitecto Frank Gehry, tropezó con un escollo similar.

"El edificio estaba revestido de paneles de acero inoxidable de arriba abajo, hasta el pavimento, y estos podían reflejar la luz deslumbrante hasta las aceras en los puntos donde estaba la gente. Allí se registraron hasta 60ºC."

"Los vecinos se quejaban de que tenían que poner el aire acondicionado al máximo", dice Glancey.

Punto de luz reflejada por el edificio Wlakie-Talkie

En esta esquina se concentra la luz reflejada por el edificio Walkie-Talkie en Londres.

Los destellos cegadores también afectaban a los conductores al pasar cerca del edificio.

Se utilizaron modelos computarizados y sensores para identificar los paneles que causaban el problema, y luego se lijaron para que interrumpieran y dividieran los rayos del sol.

Pero en la ciudad hay muchas trampas de sol a menor escala y menos conocidas, también causadas por la arquitectura, según explica Shepherd.

El físico cita al centro comercial Eden ubicado en High Wycombe, a las afueras de Londres, "que tiene una tienda con una serie de ventanas en curva y concentra la luz en un punto".

"Si pasas por ese punto, puedes sentir el calor", dice.

La utilidad del espejo curvado

Pero a veces este fenómeno es buscado y no accidental.

Los hornos solares –el más grande se encuentra en Odeillo, en Francia– utilizan espejos para recolectar luz solar y así generar altas temperaturas, generalmente para uso industrial.

La temperatura en los puntos focales puede alcanzar los 3.500ºC, y el calor se usa para poner a prueba diversos materiales, generar electricidad y para el diseño de plantas solares.

Shepherd dice que el mismo principio se utiliza en los telescopios reflectores. Un espejo curvado recoge la luz y la refleja en un foco.

Huevo frito por el calor reflejado por un rascacielos

Para comprobar la temperatura en el lugar que se concentra la luz, pusieron a freir un huevo.

"Tiene que ser una curva perfecta para obtener una imagen clara, si no se obtienen concentraciones de manchas borrosas", explica.

El fenómeno físico es el mismo para el sonido que para la luz, añade el científico. "El efecto del espejo curvado puede usarse para concentrar sonidos, o la inversa, si un orador se para en un extremo de un anfiteatro y quiere proyectar hacia la audiencia".

Pero volviendo al rascacielos y el coche, Shepherd cree que el hecho de que el Jaguar fuera negro –un color que absorbe la luz– puede haber tenido alguna influencia en los daños causados por la concentración de calor.

También dice el experto que las únicas partes afectadas son plásticas, lo cual es significativo, ya que el plástico tiene un punto de fusión mucho más bajo que el acero.

Algunos plásticos como el PVC –policloruro de vinilo– se derriten a una temperatura de 100ºC, pero pueden ablandarse antes. Según una de las últimas mediciones en el lugar señalado, en ese punto se registraron 91,3ºC.

Y en cuanto al Walkie-Talkie, el científico sugiere algunas soluciones posibles.

"Pueden cubrir las ventanas para reducir el reflejo –lo que sería un arreglo barato– pero al hacerlo estarían reduciendo la entrada de luz al edificio."

"Otra solución sería desalinear los marcos de las ventanas, y provocar alteraciones de alrededor de un milímetro, pero eso sería muy costoso", concluye Shepherd.