Londres, la capital de Reino Unido, se encuentra en estado de alerta después de que este miércoles se produjera un incidente frente a la sede del Parlamento británico, calificado de "terrorista" por las autoridades y en el que perdieron la vida 5 personas.
Esto es lo que se sabe hasta el momento:
- 5 personas, entre ellas el atacante, un agente de la policía y una mujer, han muerto en el ataque ocurrido en la zona del puente de Westminster.
- 40 personas resultaron heridas, de las cuales dos se encuentran en estado crítico.
- La Policía Metropolitana (Scotland Yard) puso en marcha un enorme despliegue de seguridad que incluyó la evacuación de las inmediaciones del Parlamento, que fue cerrado y acordonado.
- La policía afirmó que está tratando el ataque como un incidente "relacionado con el terrorismo islamista".
- Del atacante se sabe poco más que era un hombre de mediana edad que iba armado con un cuchillo, que actuó solo y fue abatido por la policía.
- Fuentes de Scotland Yard aseguraron que creen conocer la identidad del atacante, aunque no dieron más detalles.
- Las autoridades identificaron al policía muerto como Keith Palmer, de 48 años.
- La primera ministra, Theresa May, calificó los hechos de "ataque terrorista repulsivo y depravado".
¿Qué sucedió?
La policía indicó que el primer llamado de emergencia llegó a las 2:40 de la tarde hora local.
Según lo que se ha podido confirmar, un hombre embistió con un vehículo, un Hyundai gris, a varios transeúntes en el puente de Westminster, aledaño al Parlamento y al Big Ben.
Una de las personas atropelladas, una mujer, murió. Otra mujer fue rescatada con heridas de gravedad del río Támesis, al que aparentemente se arrojó tratando de escapar del ataque.
Posteriormente, el atacante empotró el vehículo contra una de las vallas que circundan el complejo del Parlamento británico.
Descendió del vehículo y apuñaló a un policía que falleció luego, pese a los esfuerzos para salvarlo.
Se trata de Keith Palmer, de 48 años, quien llevaba 15 años trabajando como policía. Era esposo y padre.
Cuando el agresor corría por la zona conocida como Old Palace Yard, que sirve como estacionamiento, hacia la puerta del Parlamento, fue abatido por los disparos de agentes no uniformados.
De este se conoce poco más que era un hombre de mediana edad y que la policía trabaja con la hipótesis de que actuó solo.
El comandante de Scotland Yard, Ben Harrington, confirmó que resultaron heridos al menos tres policías que vigilaban las instalaciones del Parlamento.
Testigos describieron escenas de caos, con gente gritando y escapando. Sin embargo algunos transeúntes atendieron a los heridos en el puente de Westminster.
En el momento del ataque, la primera ministra, Theresa May, se encontraba en Westminster, así como decenas de parlamentarios.
May fue evacuada de inmediato y conducida al número 10 de Downing Street, residencia oficial de la primera ministra, situada a pocas cuadras del lugar.
La primera ministra expresó su solidaridad con los fallecidos y heridos, así como con sus familias.
Ya en horas de la noche, May compareció ante los medios con un llamamiento a la unidad en el que calificó los hechos de un "ataque terrorista repulsivo y depravado".
También sostuvo que los londinenses "se levantarán y seguirán con su día": "Nunca se rendirán al terror y no permitirán que las voces de odio y el mal nos separen".
El Palacio de Westminster fue acordonado casi de inmediato y las primeras ambulancias llegaron en 6 minutos. Los parlamentarios permanecieron dentro del edificio hasta cuatro horas.
Los miércoles, el primer ministro de turno debate en la cámara con el jefe de la oposición, con gran asistencia de legisladores.
Los diputados y otras personas que se encontraban en el edificio -unas 500- fueron evacuados dos horas después y conducidos a la Abadía de Westminster, para ser interrogados por la policía.
Al salir pudieron ver el enorme operativo de seguridad que se desarrollaba en el centro de la capital londinense, con el Parlamento, la estación del metro y todas las calles aledañas bloqueados por policías armados.
Las víctimas fueron trasladadas en helicóptero o ambulancia a centros médicos cercanos, entre ellos el Hospital de St. Thomas.
Poco después de que se registrara el ataque, la Policía Metropolitana informó que estaba tratándolo como un "hecho terrorista hasta que se demostrara lo contrario".
Como consecuencia, la investigación la conduce el brazo antiterrorista de Scotland Yard.
Por su parte, el comité de emergencia conocido como Cobra, que coordina la respuesta de alto nivel de incidentes serios, se reunió el miércoles por la tarde.
"Terrorismo"
En la noche de este miércoles, el jefe de la unidad antiterrorista de la Policía de Londres, Mark Rowley, compareció ante la prensa para elevar de 4 a 5 el número de muertos en el incidente y situar la cifra de heridos en 40.
Rowley fue el encargado de identificar al agente muerto como Keith Palmer.
El representante de Scotland Yard dijo que creen conocer la identidad del atacante, aunque no dio más detalles.
También subrayó que trabajan con la hipótesis de que actuó "inspirado por el terrorismo internacional" y que trabajan con la sunción de que lo ocurrido tiene relación con el "terrorismo islamista".
Según Rowley, la investigación en marcha, en la que están involucrados cientos de agentes, "está avanzando a un ritmo muy rápido".
Reacciones internacionales
Diversos líderes mundiales mostraron su solidaridad con Reino Unido tras el ataque de este miércoles.
Donald Trump, presidente de Estados Unidos, habló por teléfono con la primera ministra británica para ofrecerle sus "condolencias por el ataque terrorista", según explicó el mandatario en Twitter.
"Ella es fuerte y está muy bien", agregó.
Por su parte, el presidente de Francia, Francois Hollande, expresó su "solidaridad" con sus vecinos, diciendo que "el terrorismo nos concierne a todos y Francia sabe cómo el pueblo británico sufre hoy".
La canciller alemana, Angela Merkel, dijo que sus pensamientos estaban "con nuestros amigos británicos y toda la gente de Londres". "Estamos firme y resueltamente a favor de Gran Bretaña en la lucha contra todas las formas de terrorismo", añadió.
Por su parte, el presidente español, Mariano Rajoy, también condenó el ataque. "España está con el pueblo británico", escribió en un tuit.