SANTO DOMINGO, República Dominicana.- Cada denuncia contra la violencia doméstica cuenta porque "no es saludable quedarse callada", aconseja Miriam Brito, quien 15 años después de ser condenada por el asesinato de su esposo publica un libro en el que retrata el "calvario" que vivió junto al padre de sus cinco hijos.
Brito presentó este martes "La historia real de mi vida", que empezó a escribir en 2007 en prisión, un año después de ser condenada a 20 años de cárcel por la autoría intelectual del asesinato, en 2003, de su esposo, el empresario José Castro, a quien denunció 117 veces sin que las autoridades hicieran algo a su favor.
La mujer decidió publicar ahora el libro para dar a conocer su historia "por si sirve de algo" y por los frecuentes casos de feminicidios en este país, dijo en entrevista con EFE.
"Cada vez que veo que una mujer muere (víctima de violencia) siento como si fuera yo misma", agregó Brito, quien salió de prisión en diciembre de 2007 tras ser beneficiada con un indulto.
La intención de Brito, a quien Castró golpeaba constantemente y amenazaba con matar, según sus relatos, "es llevar un mensaje a esas mujeres que no se atreven a denunciar, a las que están calladas, a las que no saben identificar los rasgos de un hombre maltratador".
"He hablado con muchas mujeres y he podido notar que dicen que (la pareja) le habla mal, que no la deja socializar o estudiar" pero consideran "que no es maltrato porque no hay golpes".
Esto es parte de una cultura herrada, afirmó. "Yo siempre denunciaba pero era un hombre con poder político y económico" y por eso no prosperaban sus reclamos en las fiscalías.
Recordó que se casó con Castro siendo menor de edad y que huyó varias veces de la casa, incluso a Estados Unidos y Argentina, pero siempre volvía ante las "amenazas" de este y por estar junto a sus hijos.
Animó a las mujeres "a denunciar, denunciar y denunciar. No nos podemos quedar calladas".
En su caso, se lamentó, "las denuncias tuvieron efecto después de la desgracia".
De acuerdo con las autoridades, el asesinato de Castro fue ejecutado por la doméstica de la familia Deydania González, sentenciada a 30 años de prisión y posteriormente también indultada, y quien había denunciado al hombre por abuso sexual.
Por el caso también fueron involucrados dos hijos de la pareja, a quienes el hombre golpeaba brutalmente, de acuerdo con Brito.
"Gracias a Dios mis hijos hoy son personas de bien, aunque siempre hay secuelas", agregó la mujer, quien junto a sus hijos ha recibido ayuda sicológica y, de hecho, está estudiando la carrera de psicología "para tratar de entender la conducta humana y cómo un hombre te puede abrazar y con esos mismos brazos golpearte".
La mujer escribió el libro junto a la periodista Nancy Brito, quien en declaraciones a Efe dijo que el objetivo es "hacer reflexionar a las mujeres sobre la necesidad de denunciar y buscar apoyo" porque "las cosas ya no son como antes".
"Aunque la atención es muy lenta, sí se puede, existen herramientas, existen programas", subrayó. EFE