SAMANÁ, República Dominicana.-La desembocadura del Río Yuna, en realidad, está mucho más contaminada por plásticos y otros desechos, en relación con la imagen de publicada por la revista británica Vogue. Pero al mismo tiempo, la publicación usó el mismo rasero ambiental para todos los destinos presentados, lo que ha hecho daño a la imagen de la República Dominicana.
El programa Show del Mediodía estuvo en la desembocadura del Río Yuna en Samaná, con su productor Iván Ruiz. Fu en ese lugar donde la ecologista y fotógrafa Carmen Danae tomó la foto que publicó la revista inglesa Vogue, generadora de una oleada de indignación y protestas de sectores nacionales contra la divulgación por las redes de la británica en relación con su edición de agosto. Los videos del sitio en que tomó la foto Danae, fueron tomados este miércoles 29 por Carlos Ramírez.
El lugar ciertamente no es turístico, no tiene a su alrededor instalaciones para recibir visitantes, pero ello no impide evidenciar que hay una cantidad excesiva de desechos y que, en realidad, la foto publicada es hasta discreta si se ve la locación.
La realidad es peor de lo presentado en la imagen de la artista, pero ello no exime a la revista del impacto negativo en la marca país al presentar solo al país con esa realidad, en comparación con las imágenes que publica de otros destinos. Y justo en un momento de relanzamiento frente a la peor crisis del turismo mundial por la emergencia internacional del COVID 19. La publicación fue un atentado a la imagen del país y al mismo tiempo se nos dispensó un trato discriminatorio al no medir con el mismo criterio medioambiental a todos los destinos presentados.
Compartimos el criterio de que la publicación, en la coyuntura actual del turismo dominicano, afecta al país directamente y presenta un aspecto parcial que no aplica como a los otros destinos presentados en el reto Reiniciar a que convocó la revista inglesa, dado que la contaminación de las playas y el ambiente es un fenómeno global, no exclusivamente dominicano, como al parecería si solo se toma en cuenta la selectividad del editor de Vogue para publicar imágenes de destinos.
Al parecer, el evento a que convocó la revista Vogue, tenía una temática cruzada entre lo medioambiental y lo turístico por lo que algunos destinos (la mayoría) están muy bien proyectados, mientras que RD es presentada en portada como depósito de desechos.
En el país ningún lugar costero o no costero, turístico o no, debería estar en las condiciones en que se muestra en este video y estas imágenes tanto de Danae como las que aporta el programa El Show del Mediodía.
Desde luego, hay que repartir culpas a quienes lo merecen: un Ministerio de Medio Ambiente que al parecer no existe, y la gente falta de conciencia que lanza esos desperdicios.
El tema se puede debatir en cualquier sentido. Pero de que es real la contaminación y el descuido, no hay dudas. Y, de paso, dar pie al debate sobre el impacto de un turismo de masas sin regulaciones medioambientales. Los hoteleros y actores de la industria del turismo son los primeros en estar conscientes de que la base del atractivo de sus propuestas de hospitalidad, es el buen estado del ambiente, su calidad paisajística, su atractivo visual y sensorial por lo que desde hace tiempo propugnan por defender sus entornos.