Santo Domingo (EFE/Carmen Jiménez).- La desigualdad que "humilla, frustra y asesina" a los niños, así como la violencia contra los menores tanto en las calles como en el hogar, son los principales desafíos de Latinoamérica, según la directora regional de Unicef, María Cristina Perceval.
En una entrevista con Efe, Perceval aseguró que América Latina es la región más violenta del mundo para los niños.
En este sentido, explicó que uno de cada cuatro asesinatos de niños que se produce al día en el mundo tiene lugar en América Latina y el Caribe, donde uno de cada dos niños son víctimas de castigos corporales en el hogar.
Perceval, de nacionalidad argentina, destacó que la "violencia en las calles y en el hogar" restringen los derechos de los niños en vez de ampliar y ensanchar sus oportunidades de igualdad y trato.
Perceval apuntó que 74 nacimientos de cada 1.000 son producto de embarazos adolescentes. También señaló que en la región ha aumentado la violencia sexual, la sexista y el tráfico y la trata con fines de explotación sexual.
Para Perceval, se trata de avanzar no solamente mirando a los gobiernos sino también a la sociedad y se preguntó qué es lo que pasa en América Latina y el Caribe, donde más del 60% de los adultos considera que "no está nada mal la violencia contra los niños".
De lo que se trata es de cambiar y de pensar en un horizonte de dignidad en el que los niños no solamente sean "el globo que se lleva para festejar el Día del Niño sino que sean el espejo en el que nos podamos mirar sin darnos vergüenza".
En cuanto al embarazo adolescente, la directora regional de Unicef subrayó que la región sigue con tasas que cuesta disminuir y mucho más erradicar.
Perceval apuntó que 74 nacimientos de cada 1.000 son producto de embarazos adolescentes.
También señaló que en la región ha aumentado la violencia sexual, la sexista y el tráfico y la trata con fines de explotación sexual.
Así, explicó que 1.100.000 niños adolescentes entre 15 y 19 años ha sufrido violencia sexual en la región, y cuatro 4 de cada diez niñas en esa franja de edad ha sufrido violencia por parte de su pareja.
"Creo que hay una ruta de la violencia sobre la infancia que hay que erradicar definitivamente para hacer posible y real la prevención del embarazo adolescente", afirmó.
Consultada sobre su opinión por la reciente despenalización del aborto en Chile en tres supuestos, Perceval aseguró que le parece "auspicioso que países como Chile hayan podido encontrar un consenso social", pero señaló que en Unicef no dan "recetas" ya que su mandato se ciñe a la Convención de los Derechos del Niño que se da en un marco de respeto a las decisiones soberanas de cada país.
"Nosotros protegemos la infancia. Así que bien por Chile, bien por otros países. La cuestión es que encuentren los caminos para que la mortalidad materna no sea el callejón sin salida de muchas mujeres en América Latina", añadió.
La directora regional de Unicef recordó que en la región se ha avanzado en la erradicación de la pobreza y que desde 1990 ha disminuido la tasa de mortalidad infantil, pero señaló que ahora es el momento de sostener la "inversión publica".
Para Perceval todos los países de la región ha avanzado con respecto a la situación de la infancia, pero no se puede ignorar que de los 195 millones de niños, 70 millones aún viven en situación de pobreza multidimensional.
Durante su estancia en Santo Domingo, Perceval asistió ayer a la presentación de un informe del Banco Mundial y Unicef en el que se señala que el matrimonio infantil y las uniones tempranas cuestan miles de millones de dólares y favorece la pobreza en República Dominicana.
En República Dominicana, más de 305.000 (11,7 %) niñas están casadas o unidas de manera estable antes de cumplir 15 años, lo que supone el porcentaje más alto en América Latina y el Caribe, y más de 790.000 (37,1%) se unieron o casaron antes de cumplir los 18 años, según un informe de Unicef que recoge datos de la encuesta ENHOGAR de 2014.
La directora regional de Unicef también se ha reunido esta semana con el presidente Danilo Medina en el marco de la presentación del próximo programa de cooperación 2018-2022. EFE