NUEVA JERSEY, Estados Unidos.-Aquí están los aspectos más destacados del día 3 del juicio por corrupción federal al senador estadounidense Robert -Bob- Menéndez en la ciudad de Newark.
Menéndez, demócrata y senador sénior de Nueva Jersey, está acusado de hacer favores oficiales para su amigo y co-acusado, el doctor Salomón Melgen, a cambio de estancias en hoteles caros, vuelos privados y cientos de miles de dólares en contribuciones de campaña.
3:30 pm
NEWARK .- “Lo miró brevemente y dijo: 'Lo siento, pero esto no me sirve de nada … lamentablemente, somos nosotros quienes decidimos si alguien está calificado para una visa'", la entonces novia de 22 años, Rosiell Polanco, se lo contó a Melgen, de 63 años, en español, de acuerdo con los correos electrónicos traducidos leídos en voz alta en el tribunal el lunes. Y con eso terminó la entrevista”.
Melgen pronto informó a Menéndez que la solicitud de visado para Polanco, así como otra para su hermana, fueron denegadas. Pero Menéndez no se dio por vencido. Su consejero mayor, Mark Lopes, le dijo que estaba trabajando en una carta de seguimiento para el cónsul general.
¿Le gustaría al senador esperar esa carta, preguntó Lopes, o llamar a la embajada ASAP (lo antes posible)?
“Llame al embajador ASAP”, escribió Menéndez como respuesta, de acuerdo con los correos electrónicos que entraron en evidencia el lunes.
En cuestión de semanas, las hermanas tuvieron otra entrevista. Y semanas más tarde, Lopes se enteró de que sus solicitudes de visado habían sido aprobadas.
“En mi opinión, esto sólo se debió al hecho de que (Robert Menéndez) intervino”, escribió Lopes al entonces jefe de gabinete de Menéndez, Danny O’Brien, añadiendo que él se lo diría a Menéndez.
Pasaron las horas durante el testimonio del lunes sobre si la mecánica corriente del gobierno se empleó para fines corruptos, e incluso en las intricaciones de los puntos de las tarjeta de crédito.
Los fiscales dicen que Menéndez usó su poder para hacer favores a Melgen a cambio de la riqueza de Melgen, que Menéndez codiciaba, pero no tenía. Menéndez, según los fiscales, fue agraciado con un hotel de lujo en París, numerosos vuelos privados, vacaciones en la villa de Melgen en República Dominicana y alrededor de 750,000 dólares en contribuciones políticas.
Las discusiones del lunes se centraron en los esfuerzos de Menéndez para interceder con funcionarios del Departamento de Estado para obtener visas de turista para las hermanas Polanco, así como una visa de estudiante para otra novia de Melgen, la actriz brasileña Juliana Lopes-Leite.
Menéndez también está acusado de ayudar a Melgen a obtener una visa para una tercera novia que no apareció en los procedimientos del lunes.
“Según su experiencia, ¿los embajadores se involucran en las solicitudes de visa?”, preguntó el fiscal J.P. Cooney a Lopes.
“Sólo si los senadores estadounidenses abogan por ellos. No era raro que el senador Menéndez abogara de manera contundente”, dijo Lopes.
El abogado de Menéndez Raymond Brown se defendió, mostrando las cartas al jurado que el senador escribió al embajador de Estados Unidos en Colombia ese mismo año, abogando por visas de turismo para una familia colombiana que no tenía relación con Melgen.
Eso, sin embargo, fue después de un debate de 20 minutos con la fiscalía sobre si tal evidencia era relevante.
“Por nuestra conversación telefónica de esa mañana, quisiera personalmente atestiguar el carácter de los ciudadanos colombianos enumerados a continuación y asegurarle que su visita a Estados Unidos es sólo para fines turísticos”, escribió Menéndez en una carta de 2008 al embajador de Estados Unidos en Colombia.
El juez William H. Walls se negó a permitir que la defensa mostrara al jurado que lo que decía era un caso similar en que Menéndez escribió al cónsul general de Estados Unidos en India sobre los visados de alguien.
Brown también destacó frases en los correos electrónicos de Lopes a funcionarios del Departamento de Estado que, según él, Menéndez no estaba buscando ningún trato especial para las novias de Melgen.
Un correo electrónico de Lopes enviado a los funcionarios del Departamento de Estado les pedía que consideraran cuidadosamente la solicitud de López-Leite, mientras que Lopes solicitaba a los funcionarios que brindaran a las hermanas Polanco “toda consideración dentro de los requisitos de la ley”.
“¿Es ese el código secreto para 'dejarla entrar' o es exactamente lo que querías decir?”, preguntó Brown.
Lopes indicó que no era un código secreto.
El juicio, que está programado para continuar e a las 9:30 de la mañana del martes, se espera que dure de seis a ocho semanas.
12:22 PM
NEWARK.- Robert Menéndez dijo en un correo electrónico de 2010 que iba a reembolsar a su amigo, el médico oftalmólogo de la Florida, Salomón Melgen, casi los 650,000 puntos de American Express que Melgen empleó en pagar una estancia de tres noches en un hotel en París para el senador, tan pronto como Menéndez acumulara puntos suficientes.
Pero Menéndez habría tardado unos 30 años en acumular esos puntos a la tasa que estaba gastando entonces, declaró un ejecutivo de American Express en el juicio de corrupción de Menéndez. Y tres años después, cuando Menéndez, por primera vez, redimió sus propios puntos de American Express, más de 135,000 de ellos, los utilizó para comprar una parrilla de alta gama que fue enviada a Nueva Jersey, según el testigo.
El testimonio de Andrew Thomas, vicepresidente de American Express, se escuchó durante el tercer día del juicio de Menéndez en Newark, en el cual los fiscales también llamaron a un empleado de Menéndez que detalló sus esfuerzos por obtener visas para las novias extranjeras del co-acusado Melgen para visitar Estados Unidos.
Los fiscales afirman que el pago de Melgen por la habitación del hotel para Menéndez, así como vuelos en su jet privado para el senador además de otros regalos, incluyendo más de US$750,000 en contribuciones políticas, fueron intercambiados por favores oficiales que Menéndez hizo a favor de Melgen, además de asegurar los visados.
Los minuciosos detalles de la acusación sobre el episodio de los puntos de la tarjeta de crédito alimentaron la historia que introdujeron en las declaraciones de apertura: Que Menéndez negoció su poder por un estilo de vida que no podía permitirse con el salario de un senador.
En el momento en que Melgen utilizó los puntos para alquilar la habitación de hotel para Menéndez, el senador había acumulado unos 58,000 puntos en su tarjeta que contrató en 2007.
“¿Así que unas diez veces más puntos que los que Robert Menéndez tardó en ganar en tres años”, preguntó la fiscal Amanda Vaugh. “Correcto”, dijo Thomas.
La abogada de Menéndez Jenny Kramer, en su contrainterrogatorio de Thomas, señaló que un correo electrónico que el yerno de Melgen envió a Menéndez señaló que la costosa habitación de hotel que Melgen alquiló era “el único tipo de habitación disponible para la redención de puntos” y que no había ninguna mención en el correo electrónico de cuántos puntos Melgen gastó.
Thomas le dijo a Kramer que no había manera de que un cliente de American Express reembolsara a otro con puntos, aunque pudieran hacer compras uno a favor del otro con ellos.
Acerca de la parrilla −una Weber Genesis, que varía en el precio de US$700 a US$1,500 en amazon.com− Kramer le preguntó a Thomas: “¿Sabe por qué el Senador Menéndez la compró y si se le dio a alguien más?”.
“No”, respondió Thomas.
El juicio se trasladó a Mark Lopes, quien se desempeñó como asesor de política de Menéndez desde finales de 2007 a mediados de 2010.
La fiscalía describió los correos electrónicos que Lopes intercambió con Menéndez y funcionarios del Departamento de Estado que apoyaban las solicitudes de visa en nombre de una estudiante de derecho y ex-actriz, Juliana Lopes-Leite, y una mujer dominicana y su hermana que en los intercambios de correo electrónico eran “amigas” De Melgen. En los correos electrónicos, estaba claro que Melgen había pedido ayuda a las mujeres, que en la acusación de Menéndez se revelan como las novias de Melgen.
Lopes dijo que en su papel habría trabajado en las solicitudes de visado “cada uno o dos meses", pero no todas las solicitudes se llevaron a la oficina. En un correo electrónico con el tema “Petición del Dr. Melgen”, que se refería a la mujer dominicana y a su hermana, Lopes le dijo a Menéndez: “Estamos preparando una carta general de apoyo a usted”, y le pidió: “Ok para enviarlo, ¿verdad? "
“Sí, además de llamar, si fuera necesario”, respondió Menéndez.