Washington, 23 mar (EFE).- El presidente estadounidense, Donald Trump, celebró este sábado el fin del territorio del "califato" proclamado por el grupo terrorista Estado Islámico (EI) en 2014 en Siria e Irak, tras los combates en los que cayeron los últimos yihadistas que resistían en la población siria de Al Baguz.
"Me complace anunciar que, junto con nuestros socios de la Coalición Internacional Contra el EI, Estados Unidos ha liberado todo el territorio controlado por el EI en Siria e Irak, el 100 por ciento del califato", señaló Trump en un comunicado divulgado por la Casa Blanca.
"Si bien, en ocasiones, estos cobardes resurgirán, han perdido todo prestigio y poder. Son perdedores y siempre lo serán", agregó el mandatario.
Trump consideró que la pérdida de territorio de EI "es una prueba más de su falsa narrativa", que dijo que trata de legitimar actos salvajes como ejecuciones "brutales", la explotación de niños como soldados y abusos sexuales y asesinatos de mujeres y niños.
"Para todos los jóvenes en internet que creen en la propaganda de EI, vas a morir si te unes", advirtió Trump.
En esa nota, subrayó que EE.UU. continuará vigilando al EI y liderando los esfuerzos internacionales para combatir a la organización terrorista.
"Continuaremos trabajando con nuestros socios y aliados para aplastar totalmente a los terroristas islámicos radicales", puntualizó.
Las milicias kurdas que se enfrentaban al grupo yihadista en Al Baguz anunciaron el esperado final del dominio territorial del EI a primera hora de la mañana de este sábado, después del final de los combates que se adentraron en la noche del viernes en esta pequeña población rural cercana a la frontera iraquí.
El anuncio del final del EI no era ningún secreto, puesto que el Gobierno de Estados Unidos, que apoya a las milicias kurdas con tropas sobre el terreno, se adelantó a los hechos y proclamó la victoria el mismo viernes, mientras sus cazas seguían bombardeando las cuevas en las que se refugiaban los últimos combatientes del "califato".
Los milicianos de las Fuerzas de Siria Democrática (FSD), alianza armada que aglutina a kurdos y árabes, se apresuraron a celebrar la conquista de Al Baguz izando su bandera amarilla, en la que sobresale un mapa de Siria, en las azoteas de los edificios carcomidos por la metralla y los obuses.
Para oficializar la victoria, las FSD celebraron un desfile militar y una ceremonia en una base situada en el campo petrolero de Al Omar, desde donde se ha dirigido la campaña de Al Baguz en los últimos meses. EFE