Washington, Estados Unidos (EFE).- Un tribunal de apelaciones del estado de Virginia (EE.UU.) determinó este lunes que la exsoldado Chelsea Manning, fuente de una filtración masiva de documentos confidenciales del Gobierno estadounidense a WikiLeaks, deberá continuar en prisión a la espera de juicio.
La decisión, alcanzada de manera unánime por los tres magistrados que componen el tribunal, es en respuesta a una petición de los abogados de Manning, que solicitaron que su cliente fuera puesta en libertad mientras aguardaba al juicio al que se enfrenta por su relación con WikiLeaks.
"El tribunal considera que no existe ningún error en la decisión de la Corte de Distrito y mantiene los cargos de desacato civil. La corte además deniega la solicitud de la defendida para una puesta en liberta bajo fianza", señala el fallo, al que ha tenido acceso Efe.
Manning fue encarcelada el pasado 8 de marzo por negarse a declarar ante un juez federal de EE.UU. sobre su divulgación de secretos militares en 2010.
Tras el fallo de hoy, la exagente de los servicios de inteligencia del Departamento de Defensa deberá permanecer recluida en un centro penitenciario de Alexandria (Virginia) hasta que testifique o hasta que el gran jurado que lleva su caso haya completado sus investigaciones sobre WikiLeaks.
En su solicitud de puesta en libertad, la defensa de la exsoldado alegó que ella se negó a declarar porque la Corte de Distrito no tuvo en cuenta pruebas que habrían evitado que tuviera que testificar ante un gran jurado.
Además, según han informado este lunes algunos medios locales, los abogados de Manning también argumentaron que la detención del líder de WikiLeaks, Julian Assange, el pasado 11 de abril, hacía que el testimonio de su cliente no fuera necesario.
Assange fue arrestado en la embajada de Ecuador en Londres a petición de EE.UU., que acusa al activista australiano de coordinarse con Manning para descifrar claves de acceso a ordenadores del Gobierno estadounidense con las que acceder a información clasificada sin dejar rastro.
Manning fue condenada en 2013 -cuando aún era conocida como el soldado Bradley Manning- a 35 años de prisión como responsable de la mayor filtración de documentos confidenciales de la historia de EE.UU.
El 17 de mayo de 2017 fue liberada después de siete años privada de libertad, una quinta parte de la pena que le había sido impuesta, gracias al perdón que le otorgó en enero de ese año el entonces presidente, Barack Obama (2009-2017), tres días antes de abandonar la Casa Blanca. EFE