SANTO DOMINGO, República Dominicana.- El exsenador Tommy Galán, vinculado al caso pago de sobornos pagados por la empresa brasileña Odebrecht, aseguró este lunes que ninguna prueba lo vincula al caso de corrupción en su contra, así como de otros seis procesados.

El exlegislador aseveró que “las pretensiones probatorias de la acusación, cuando no ponen en evidencia la mentira, desnudan la doblez y perversidad con que se me involucró, partiendo de especulaciones y manipulaciones expresadas con propósitos inconfesables”.

“No sé qué busco aquí”.  Ninguna prueba me vincula”, afirmó Galán al reinicio del proceso legal.

El exsenador por San Cristóbal aseguró que la única razón de su implicación en el pago de coimas por US$ 92 millones a funcionarios en República Dominicana para para adjudicarse ilegalmente obras públicas licitadas entre 2002 y 2012, era la de buscar un cierre expedito del expediente en la jurisdicción privilegiada.

En ese sentido, acusó al exprocurador de la República, Jean Alain Rodríguez, de buscar con el caso un “trofeo político”, asumiendo, aseguró Galán, “el error de que podría de ese modo ejercer control, celeridad e injerencia”.

En su momento, todo evidenciaba que la única razón de implicarme era la búsqueda de un cierre expedito de este mal llamado expediente en la jurisdicción privilegiada, propósito que siempre alentaron las ínfulas mesiánicas del ex procurador Jean Alain Rodríguez

Asimismo, aseveró que Rodríguez no asumió el caso con la responsabilidad que demandaban las “elevadas funciones de su cargo, para las cuales demostró carecer de madurez, entereza y tino”.

“Guardo la esperanza de que en el porvenir, todos los entuertos puedan ser enmendados con estricto apego al debido proceso de ley, en el que se respete mi derecho a reivindicar la verdad ante los ojos y oídos de una sociedad ante la cual es mi deseo rendir cuentas a través del juicio, y a la cual, solo le pido que me escuche, que valore las pruebas del proceso con frialdad, para que aprecie mi total y absoluta desvinculación de los hechos que se me imputan, brindándome así lo que toda nación le debe a sus ciudadanos, la oportunidad de defender mi honor por encima de los prejuicios, manipulaciones, chantaje, atropellos y abusos de poder con que se le ha robado a mi familia la paz y el sosiego emocional que merece cualquier familia de trabajo en nuestro país”, indicó.

Finalmente, sostuvo que “el tiempo hará su papel, por encima de todos”, y sostuvo que “no hay forma de que el poder temporal edifique una verdadera justicia sosteniendo su propósito en mentiras, abusos y miedo”.

“La sociedad dominicana, que podrá ser momentáneamente turbada, no será descarrilada de su propósito de que sean establecidas responsabilidades, pero nunca perdonará que en el camino se sepulte la verdad, y que de sus cenizas, un poder injusto, banal y pantomímico se burle de una nación despierta y justa”.