Brasilia, 27 abr (EFE).- El presidente brasileño, Michel Temer, salió hoy en "defensa de la honra" de su familia en un inusual pronunciamiento público tras la divulgación de versiones de prensa que salpican a sus parientes en un escándalo de corrupción.

"Quiero protestar contra mentiras que son lanzadas contra mi honra. No se trata de mentiras dirigidas a mi posición funcional sino a mi honra personal. Y, peor aún, mentiras que afectan a mi familia y a mi hijo que tiene 9 años de edad", aseguró el jefe de Estado en una comparecencia ante la prensa en el Palacio presidencial de Planalto.

De acuerdo con el mandatario, la insinuación de que lavó dinero de origen ilegal mediante la compra y la reforma de inmuebles de su familia es "un disparate" y un intento de desmoralizar la figura del presidente de la República.

El gobernante decidió convocar a la prensa para dar explicaciones luego de que el diario Folha de Sao Paulo, a partir de supuestas filtraciones de policías responsables por una investigación sobre su supuesta responsabilidad en una corruptela, afirmara que los investigadores sospechan que el mandatario lavó dinero procedente de sobornos mediante la compra de inmuebles adquiridos a nombre de su esposa y de su hijo de 9 años.

"Yo sé defenderme y defender a mi familia y a mis hijos y no quiero salir de la Presidencia, no sé cuándo, y cargar con esa mancha que irresponsablemente intentan imputarme a todo momento"

De acuerdo con el influyente diario, la Policía investiga si Temer usó 2 millones de reales (unos 580.000 dólares) que supuestamente recibió de soborno a cambio de firmar un decreto que benefició a una empresa portuaria para comprar inmuebles a nombre de sus familiares y reformar otros dos que pertenecen a otra hija y a su suegra.

"Yo trabajo hace casi 60 años como abogado, profesor, fiscal, presidente de la Cámara de Diputados, vicepresidente y ahora presidente. Son casi 60 años de salarios, honorarios y jubilaciones recibidas. Todo absolutamente dentro de la ley y debidamente informado en mis declaraciones de impuesto de renta", dijo.

"Cualquier contador o profesor de matemática consigue concluir que esos recursos recibidos a lo largo del tiempo son suficientes para comprar los inmuebles que compré y reformar los que reformé", agregó tras negar que sea propietario de una casa en la playa, en el campo o "de casa en Miami".

El presidente agregó que los policías que investigan su supuesta participación en un caso de pago de sobornos aún ni le pidieron que explicara el origen de los recursos con los que compró sus inmuebles y ya están divulgando que son ilegales.

Señaló que, como defensor de la libertad de prensa, no culpa a los medios por publicar informaciones que recibe de fuentes que considera fidedignas, pero sí quiere saber quién "filtra esos datos irresponsablemente a la prensa".

"Se trata de una persecución criminal disfrazada de investigación. En lugar de indicios, le divulgan a la prensa ilaciones y suposiciones", afirmó.

De acuerdo con Temer, esa campaña tan solo intenta desmoralizar la figura del presidente y afectar el desarrollo del país.

El jefe de Estado afirmó que había decidido dar un pronunciamiento enfático e improvisado, que no es su estilo, porque quería defender su moral de personas que no sabe "si tienen moral" para atacarlo.

"Yo sé defenderme y defender a mi familia y a mis hijos y no quiero salir de la Presidencia, no sé cuándo, y cargar con esa mancha que irresponsablemente intentan imputarme a todo momento", afirmó.

Dijo igualmente que los policías que lo investigan concluyeron tras el primer plazo reglamentario de 90 días, que no había nada ilícito en su comportamiento y solicitaron un plazo de 60 días para seguir las investigaciones, que concluyeron esta semana nuevamente sin conclusiones.

Por ende, pidieron ahora otros 60 días porque quieren "dejar al presidente en una situación incómoda institucionalmente". EFE