SANTO DOMINGO, República Dominicana.-Pese a que alrededor del 70% de los adictos sufre trastornos mentales, el Estado no cuenta con un sistema integral efectivo  para ayudar a esos pacientes, lamentó la Sociedad Dominicana de Siquiatría, que discutió con la Organización Panamericana de la Salud la implementación de un plan.

Los miembros del gremio  y el asesor en abuso de sustancias de la OPS, Luis Alfonzo Bello,  debatieron el rol del siquiatra en una red  para  tratar la patología dual, combinación de adicción con males siquiátricos, y abogaron porque el Sistema de Seguridad Social asuma el tratamiento a esos enfermos.

En el panel,  Bello citó entre las razones para defender la iniciativa la prevalencia de la enfermedad y el costo social y económico, ya  que  un 3.6% de la mortalidad mundial y un 4.6% de años de vida perdidos por discapacidad son  atribuidas al alcohol y a otras drogas.

Definió como urgente fortalecer las  políticas públicas contra el consumo de estupefacientes, de manera que sea erradicado y evitar así tantas vidas  truncadas,  un drama que conlleva una alta inversión en recuperación.

Está a favor de mecanismos como el examen de dopaje que permitan la detención temprana en usuarios de grupos vulnerables, sobre todo, adolescentes y jóvenes y  explicó que  el tabaco, alcohol, fármacos, cocaína, marihuana y la heroína son los más usados.

En tanto, el presidente de la Sociedad Dominicana de Siquiatría, Vicente Vargas, sostuvo que los trastornos siquiátricos en adictos se asocian con peor pronóstico, mayor deseo de consumo y más recaídas y suicidios.

“Es enorme el porciento de personas que necesita tratamiento y no lo recibe. Es muy alta la dependencia por sustancias sicoactivas en nuestro país y aun así no existen estos servicios  en la mayoría de los casos”

Alertó que un cuadro de déficit de atención e hiperactividad en la infancia está relacionado con una mayor probabilidad de desarrollar trastornos por abuso de sustancias en la adultez.

Indicó que es clara la relación de las adicciones con trastornos siquiátricos como esquizofrenia, bipolaridad, depresión mayor, ansiedad, estrés postraumático, trastornos de personalidad y  déficit de atención.

Deploró que a pesar de las cargas producidas por estas enfermedades,  la asistencia estatal  es muy limitada y deficiente. Declaró que el 22% de los afectados tiene dos diagnósticos y el 23% entre tres o más.

“Es enorme el porciento de personas que necesita tratamiento y no lo recibe. Es muy alta la dependencia por sustancias sicoactivas en nuestro país y aun así no existen estos servicios  en la mayoría de los casos”, se quejó.

Expresó que  la morbilidad siquiátrica es  uno de los problemas principales que presenta el individuo con trastornos por uso de narcóticos.