SANTO DOMINGO, República Dominicana.- De camino a dejar a su hijo en el Aeropuerto Las Américas, Federico fue parado unas 10 veces porque manejaba durante el horario de toque de queda. Con itinerario del vuelo en la mano, en cada parada mostraba y explicaba a los agentes su destino. "¿El aeropuerto está abierto?", le cuestionó  un policía. Y dos, en diferentes paradas, le preguntaron si había algo "pa' la canquiña" y la cena.

Y así se acumulan testimonios sobre diversos incidentes de ciudadanos con policías, confusiones de ambas partes sobre qué se permite y cómo, en las disposiciones del decreto 740-20, que marcó el inicio del 2021.

Este fin de semana, el coronel Neris Aguiar fue destituido de su cargo como comandante del municipio Boca Chica tras divulgarse un audio en el que dice que para transitar en horario de toque de queda los periodistas necesitaban permiso de tránsito emitido por la Presidencia, pese a que el decreto solo pide una acreditación.

Uno de los incidentes más recientes fue el del ciclista Fracis Serrano. Fue mandado a detenerse por unos policías, no lo hizo y se justificó en que no se encontraba en ningún parque (ahora clausurados), sino corriendo en la vía publica. Los agentes lo siguieron hasta la entrada de su casa. Un forcejeo y se lo llevaron preso. "Me están llevando ilegalmente de mi casa", gritaba Serrano.

La versión de la Policía apunta a que el ciclista ignoró el llamado a detenerse y desafió a la autoridad.

Las medidas del Gobierno establecen el cierre de "todos los espacios públicos abiertos al aire libre, como parques, malecones, gimnasios". Sin embargo, el pasado lunes, Día de Reyes adelantado, en la Zona Colonial fue muy común ver grupos de tres y cuatro personas sentadas en los parques y espacios propicios, a la vista de los agentes de la Policía Turística.

Lo mismo en el Malecón de Santo Domingo: ciudadanos trotando y parejas o grupos de personas en pequeños grupos sentados a lo largo de sus bancos.

¿Se puede hacer ejercicio en los parques?

Esto respondió el vocero de la Policía Nacional, coronel Miguel Balbuena: "Los parques temporalmente están cerrados para evitar aglomeraciones; no es que la persona no pueda hacer ejercicio. Es para evitar las aglomeraciones, mantener distanciamiento físico, higienizarse las manos y usar mascarillas".

¿Pero y entonces? ¿Puede o no puede la gente ejercitarse? ¿Debe o no debe ser detenida y hacerle pasar un mal rato tras las rejas? La conclusión queda medianamente bajo interpretación. Sí, puede ejercitarse, pero siempre que la autoridad lo ordene, y hay que detenerse…

¿Es permitido que pequeños grupos se sienten en espacios abiertos?

"Si tienen mascarillas, si están hablando entre ellos y se han higienizado las manos, y tienen su mascarillas puesta, deben guardar la distancia. Si no guardan la distancia a menos de lo que establece la lógica de contagio, que es 1.5, dos metros, ya es un asunto indebido", añade el coronel.

Si bien usted guarda distancias y usa mascarilla en un parque, como recomienda el vocero policial, el encontrarse en un espacio clausurado -el decreto es claro- lo podría poner en apuros como le pasó a Serrano, aunque evidentemente los agentes priorizan evitar las aglomeraciones.

Al hablar de estos incidentes, el vocero policial deja ver su desbordada fatiga ante lo que entiende que ya cada ciudadano debería tener aprendido e interiorizado. "No podemos asignar un policía a cada grupo que esté en la geografía nacional; es un asunto de educación", sostuvo.

Entre el 27 de julio y el 30 de diciembre, la Policía Nacional detuvo a 137,698 personas por infringir el toque de queda. De ese total, 63,444 fueron enviadas a la justicia y 71,059 sometidas a sanciones administrativas por, adicionalmente, ignorar el uso de mascarillas, una disposición ya obligatoria desde mediados de abril.

En los primeros cuatro días de este año sumaron 2,073 las personas que recibieron sanciones administrativas por no usar mascarillas.  "Tenemos 10 meses en esto. O sea, es un asunto de corresponsabilidad, de conciencia ciudadana", insiste el coronel Balbuena.

En las calles hay unos 32,000 efectivos, entre policías y militares, y 156 puntos de control donde los agentes generan entre 4,700 y 5,000 intervenciones diarias con ciudadanos, dice el vocero de la Policía.

"Son casos aislados"

El coronel Miguel Balbuena indicó que desde el 29 de diciembre  se difunde entre los agentes toda la información contenida en el decreto 740-20. "Muchas veces un agente de policía no maneja al dedillo quizá la parte de protocolo, pero siempre estamos trabajando de forma reiterada en eso".

"Tenemos una cabeza y un cerebro para pensar de que debemos autoprotegernos, a nosotros, a nuestros envejecientes y personas vulnerables, en este contexto de pandemia", pregona Balbuena.

Explicó que en la Policía existe una dirección de "Planificación y Desarrollo" que se encarga de difundir en todas las direcciones, regionales y centrales, en toda estructura policial, las nuevas disposiciones de los decretos.

"Vuelvo y le digo, son casos aislados que se dan. Nuestros policías tienen de 4,700 a 5,000 intervenciones diarias. Que una intervención de esas, o dos, tres, cuatro, cinco intervenciones (sean irregulares y con) policías que no estén debidamente identificados…".

Para garantizar un correcto abordaje hay un oficial superior en las labores preventivas relacionadas con la pandemia, dijo y recordó que, además, la Policía Nacional debe cumplir con sus labores habituales, como es la investigación, inteligencia, prevención del delito y la administración de la institución.

"Muchas veces cuando llegamos a esas aglomeraciones donde esas personas participan, somos apedreados y atacados con botellas", denunció Balbuena.

Según su conteo, 14 policías han fallecido por la covid-19 y 2,200 se han contagiado en sus labores de vigilancia en lo que va de la pandemia.