El vicepresidente ejecutivo de la Fundación Institucionalidad y Justicia (FINJUS), Servio Tulio Castaños Guzmán, dijo que los partidos políticos se han convertido en el país en una herramienta de lavado, al no identifican sus donaciones, lo que calificó de muy grave.
En este proceso, rumbo a las elecciones nacionales del 15 de mayo, advirtió cómo se han venido diluyendo los partidos políticos, lo que le preocupa mucho como organización de la sociedad civil.
“A nosotros nos ha sorprendido, por ejemplo, la fortaleza, que ha mostrado la Junta Central Electoral, esa es una realidad”, manifestó Castaños Guzmán en una entrevista con Fernando Quiroz, en el programa Aquí es la Noticia, del Canal 25.
Precisó que unos años atrás era al revés, los partidos políticos mostraban, durante los procesos, cierta fortaleza, y la débil era la JCE; ahora todo cambió, la fuerte es la entidad electoral, y los débiles son los partidos políticos.
“Fíjate que los partidos políticos, lamentablemente, uno no lo quisiera decir, pero esa es una realidad, y el propio presidente de la JCE lo ha advertido, se han convertido en una herramienta de lavado, porque no identifican las donaciones,…eso es muy grave”, advirtió.
Castaños Guzmán se mostró esperanzado de que los resultados electorales contribuyan en un avance en la institucionalidad de la nación, y destacó la importancia de los Encuentros Presidenciales que realiza Finjus, en coordinación con la Universidad Nacional Pedro Henríquez Ureña (UNPHU).
“Traviesos” en política
Se han metido a la política, “unos traviesos” y gente que no son profesionales de esta área, insistió el ejecutivo de la Finjus.
“Para usted ser político, usted tiene que tener ser un profesional de la política, tiene que tener una formación de cómo funciona el Estado, de cómo funcionan las instituciones que tu pretendes dirigir, por ejemplo el Congreso, o nuestros ayuntamientos, por ejemplo, un regidor, tiene que tener una visión de qué es de lo que se trata”, consideró.
Señaló que en los pueblos es donde se está dando más esta situación, gente que se dedica a actividades que no son muy propias de la política están aspirando en las citadas instituciones o instancias de poder.
“En el mismo Congreso Nacional, como gente por ejemplo, ligada al transporte, -y no es que yo critique, ni crea que gente que esté ligada al transporte no tenga la capacidad, ese no es el debate-, es que yo creo que este proceso debe llevarnos a todos, viendo el abanico de quienes están aspirando a posiciones electivas, al centro de la reflexión de toda la sociedad”, añadió.
Al contestar como dueños de bancas de loterías y apuestas en los pueblos aspiran a cargos electivos, respondió que la democracia ha degenerado en plutocracia, la democracia del dinero, y entonces, todo el que tiene cierto capital, independientemente de cuál sea su origen, tiene el poder para incidir a lo interno de los partidos políticos.
Consideró que los partidos se están diluyendo por la violación a todo lo que tiene que ver con la democracia interna, por la falta de celebración de primarias, que es contrario a ese principio constitucional.
“Tú no te imagina la cantidad de jóvenes, sobre todo, que se han desencantado durante este proceso, que venían haciendo política, y que han sido desplazados por personas, que teniendo el poder del dinero, han terminado ocupando las posiciones a las que ellos aspiraban, sin la celebración de primarias, sin tomar en cuenta las capacidades, y eso va a tener un impacto”
Los partidos, sin la celebración de primarias, se han inventado el mecanismo de las encuestas. “Pero tú sabes cómo se manejan las encuestas…”.
Tranque Ley de partidos
“Y de ahí, la necesidad, quiera Dios que el Congreso le tome la palabra el Presidente, de que apruebe una ley de partido político que real y efectivamente pueda someter al orden a estas instituciones”, justifico Castaños Guzmán ante tantos desordenes.
El vicepresidente ejecutivo de la Finjus considera como buena la propuesta de Ley de Partidos Políticos que formuló el presidente de la JCE, Roberto Rosario Márquez, por lo que entiende que la aprobación en el Congreso Nacional debe ir por esa línea.
“Porque lo que los partidos quieren es una ley que le legitime todo este desorden de cómo se ha venido ejerciendo la política en República Dominicana”, alertó.
Entre los puntos que indica que partidos no quieren de la Ley de Partidos Políticos figura que se identifiquen quienes son los donantes del sector privado, pese a que al sector empresarial expresa interés en que se transparente.
La propuesta de ley de la JCE establece una cuota considerable para los programas de formación política, pero los partidos la disminuyen a unos niveles que no garantiza una buena formación de los interesados en el ejercicio de la política partidaria.
La Ley de Partidos Políticos está contemplada en la Ley Nacional de Desarrollo, que debió ser aprobada en enero de 2015, como muy tarde.
Leyes
Finjus es un centro de pensamiento reconocida internacionalmente. Les obliga a tener visión de las cosas basada en la ciencia y los estudios.
Cita entre la gran cantidad de leyes pendientes en el país, en el marco de la Constitución de 2010, la Ley de la Reforma Policial; la Policía Técnica Judicial, La Ley de Extinción de Dominio (que tiene que ver con el lavado de activo, y evitaría devolver bienes productos de ilícitos a personas tras cumplir condenas).
Pendiente, igual, el Código Penal, que data del siglo XIX, pese a que la modalidad del crimen ha cambiado.
Rechaza la tesis de que la justicia en el país hay que refundarla, y estima que lo que se necesita es aplicar la ley.
Puso como ejemplo que el caso de Bahía de Águilas, uno de los más escandalosos en la historia, es un testimonio de que cuando existe voluntad política el sistema le da respuesta a lo que se le somete.
Sentencias narcos
Los casos de sentencias que periódicamente se presentan, principalmente por jueces suplentes, favoreciendo a narcotraficantes, no son coincidencias si no una práctica.
En muchas ocasiones, mencionó, el juez o jueza titular rechaza conocer ciertos casos para no dañar su hoja de servicio, y son conocidos por jueces suplentes, generalmente no de carreras, sino abogados contratados.
Entiende que en el país se está consciente del riesgo del narcotráfico, que asecha por tener cuotas de poder en estructuras del Estado, pero que no se han creado las herramientas para poder detectar con claridad a e esos sectores desde el ejercicio de la política.