SANTO DOMINGO, República Dominicana.- La Asociación Dominicana de Regidores (ASODORE) no acepta la presidencia del alcalde del municipio Santo Domingo Norte, Francisco Fernández para la Mancomunidad de Santo Domingo, por no ser electo en un consenso, sino por acuerdo político.

Los regidores reclaman que el próximo consejo directivo sea resultado de un consenso político e institucional y exprese la diversidad de todos los organismos y sectores que convergen en esa agrupación municipal, así como la integración a la diversidad de géneros.

En virtud de que los regidores Eveling Hernández y Tácito Perdomo, de Santo Domingo Este y Waldys Taveras, perteneciente al Distrito Nacional, impugnaran la elección del alcalde Fernández a la presidencia de la Mancomunidad, alegando que violan los estatutos de esta organización, Roberto Salcedo, Alcalde del Distrito Nacional y presidente de la Mancomunidad de Ayuntamientos del Gran Santo Domingo, aplazó la juramentación de Fernández hasta se pudiera efectuar una reunión con los regidores.

En el día de hoy los regidores y voceros de los partidos participaron de un encuentro para discutir cómo debe ser llevado el proceso de elección de los miembros que van a formar parte del consejo directivo de la Mancomunidad.

Según el regidor Waldys Taveras, el consenso de la mancomunidad debe representar en su dirección las diversas instancias institucionales, políticas y comunitarias que interactúan en el quehacer municipal del Distrito Nacional, la provincia Santo Domingo, los municipios de San Cristóbal, Nigua y los Bajos de Haina.

El vertedero de Duquesa

El alcalde de Santo Domingo Norte, Francisco Fernández, propone convertir a Duquesa en un vertedero como los de países desarrollados, que permita construir un relleno sanitario con los desechos que diariamente se depositan en el.

Fernández explicó que en la gestión pasada, se firmó un contrato para que una empresa le diera mantenimiento al vertedero, cercando el perímetro y reparando las carreteras que dan acceso al campo donde se almacenan los desechos, pero a la fecha no se ha cumplido el contrato.

El nuevo alcalde puso un plazo de 60 días para que la empresa contratada ponga en funcionamiento los servicios acordados.