SANTO DOMINGO, República Dominicana.- En la República Dominicana no tenemos todavía un sistema de salud, sino un sistema para atender enfermedades y aún faltan muchas acciones oficiales para mejorar el sistema de salud de la sociedad dominicana. El rector de UNIBE, Julio Amado Castaños Guzmán dijo estas palabras en el acto de graduación de 591 nuevos profesionales, actividad a la que asistió el presidente Danilo Medina, debido a la graduación de una de sus hijas.

En nuestro caso, la atención a la salud ,  se lleva a cabo en un sistema lleno de necesidades y dificultades.  No ha sido fácil desarrollar un modelo universal, equitativo y de calidad”, dijo Castaños Guzmán.

“Todavía no me atrevería a afirmar que tenemos un sistema de salud; más bien lo que tenemos, es un sistema para tratar enfermedades que no han podido ser prevenidas”.

Expresó que son múltiples los factores que intervienen  donde no todo depende de la disponibilidad y la accesibilidad a los  servicios  médicos. 

“En estos tiempos, se agregan otros elementos relacionados con la propia vulnerabilidad de los seres humanos y la falta de consciencia sobre el auto cuidado, hábitos saludables  y calidad de vida, lo cual nos convierte en seres irracionales con capacidad de hacernos daños a nosotros mismos”.

DISCURSO DEL RECTOR DE UNIBE, DR.JULIO AMADO CASTANOS GUZMAN, CEREMONIA DE GRADUACION MATUTINA 4 DE JULIO 2015

Señoras y Señores:

En el nombre de la Universidad Iberoamericana, UNIBE y de su Consejo de Regentes, celebramos junto a todos ustedes con alegría y entusiasmo este trigésimo noveno acto de graduación.

591 profesionales distribuidos en 18 programas de grados, y 17 programas de postgrados y especialidades, han culminado finalmente sus planes de estudios.

Además, UNIBE en este mes celebra  su Trigésimo Tercer aniversario de fundación en el año 1982.  Gracias a la visión y proyección institucional desde sus inicios, se ha logrado colocar en un lugar cimero en el sistema de  educación superior de la Republica Dominicana.

Considero oportuno y justo expresar un agradecimiento especial a los graduandos y graduandas internacionales, procedentes de 13 países: Estados Unidos, Perú, Cuba, Francia, Alemania, Haití, España, Suiza, Venezuela, Italia, Pakistán, México y sobre todo, Puerto Rico.

Julio Amado Castaños Guzmán y la primera dama Candy de Medina

Tal y como lo planteó hace 33 años el Dr. Jorge A. Hazoury, fundador de esta universidad, proclamando el día de su fundación, que UNIBE se convertiría en un Crisol de Hispanidad.

Gracias a Ustedes por haber elegido nuestro país y a UNIBE.

De la misma forma, quisiéramos también dar un voto de gratitud a todas las universidades y hospitales de otros países que han sido durante este tiempo nuestros aliados en programas y titulaciones conjuntas, estableciendo puentes que han permitido el intercambio de profesores y estudiantes.  A todos ellos, gracias por su confianza y colaboración.

Señoras y Señores, esta promoción tiene para la universidad una connotación muy particular.  Estamos frente a un nutrido grupo de jóvenes que  han recibido sus títulos de: Médicos, Odontólogos y Psicólogos. 

Además,  a partir de este momento, oficialmente, abandonan nuestras aulas, luego de haber agotado esta primera etapa de su formación profesional.

Estos últimos años, indudablemente, han dejado en ustedes  experiencias, aprendizajes  y huellas que les servirán para toda su vida.

Por la naturaleza de estas profesiones, tendrán que continuar hacia la especialización, por lo cual aún tienen por delante, un importante camino por recorrer.

Ser profesional de la salud requiere de cualidades y competencias   particulares y  diferentes a las demás profesiones.

Desde el  año 1728 A.C., en el Código de Hammurabi de la Antigua Mesopotamia, ya aparece descrito el compromiso del médico, así como su valoración en la sociedad.

La sociedad de ahora y la de siempre, ha esperado mucho de los profesionales de la salud.  Se trata de un ejercicio donde los errores tienen un alto costo, no sólo para el que lo comete, sino para el que es afectado por el mismo.

Estimados nóveles profesionales, hace unos minutos recibieron  de nuestras manos algo más que un título universitario; les hemos otorgado las investiduras más relevantes que existen en el espacio universitario.

Han optado por carreras que se ejercen colocando en el centro de la actividad  al propio ser humano.  De igual manera  son profesiones  que se ejercen abordando problemas físicos y mentales  en el marco de    situaciones contrapuestas:  la salud Vs la enfermedad.  Prevenir o enfermar, aliento  o desaliento.  Bienestar o dolor.  Vivir o morir. 

La carrera de Odontología en UNIBE, desde sus inicios, ha sido una carrera emblemática.  Reconocida por su programa académico de vanguardia, lo cual ha permitido imprimirle un sello especial e inconfundible a nuestros egresados, hoy dispersos en diferentes continentes.

Lo mismo podríamos afirmar de nuestros programas de Psicología, caracterizados por su formación integral en las diversas áreas de la conducta humana y sus distintos abordajes.  En la última década, esta escuela ha logrado colocarse entre las más prestigiosas y competitivas de las escuelas de ciencias de la conducta del país.

En cuanto a la Escuela de Medicina, su prestigio y su historia, su  modelo educativo único en el país y su perfil  internacional le  ha permitido situarse como la escuela actualmente de mayor reconocimiento  sin lugar a dudas, en   la República Dominicana.

Ahora bien, el grado que ustedes reciben en el día de hoy, lo han alcanzado a base de esfuerzos y sacrificios, somos testigos, al igual que sus familiares, cuánto les ha costado llegar a este momento.

En relación con el ejercicio de estas profesiones, hay que subrayar que a pesar de los avances y conquistas de las ciencias médicas, todavía hay grandes retos en el campo de las ciencias medicas.

Las ciencias médicas vienen experimentando grandes cambios y están emergiendo nuevos paradigmas debido a los avances en la tecnología, la biología molecular, la genética y el diseño de nuevas estrategias terapéuticas.

Estamos sin darnos cuenta migrando desde una medicina de presunción a una medicina de precisión.  Esto  augura sensibles transformaciones en el  modelo de  gestión y en el modelo de atención.

Hoy en día  se lucha intensamente con enfermedades, a las que muchas veces no podemos dar una solución .  Dentro de las cuales encontramos: el cáncer, las enfermedades congénitas, el Ebola, los trastornos sicopatológicos, las enfermedades degenerativas, entre otras.

Es sobresaliente como se ha avanzado en materia de capacidad diagnostica y el uso de la comunicación y la información al servicio de las ciencias de la salud . 

Pero pesar de los tangibles  avances logrados aun las enfermedades cardiovasculares,  continúan siendo la principal causa de muerte en el mundo occidental.

Otro aspecto y que no deja de ser la parte injusta y cruel de la prestación en salud es   la ausencia de un  reparto equitativo de los servicios de salud.  Todavia en pleno Siglo XXI, millones de ciudadanos del mundo viven en la marginalidad y sin acceso a una prestación de salud de calidad.

Mantenerse en salud, o recuperarla cuando se ha perdido, sigue siendo una aspiración para muchos ciudadanos de cualquier país, incluso de aquellos con economías muy fuertes.

En nuestro caso, la atención a la salud ,  se lleva a cabo en un sistema lleno de necesidades y dificultades.  No ha sido fácil desarrollar un modelo universal, equitativo y de calidad.

Todavía no me atrevería a afirmar que tenemos un sistema de salud; más bien lo que tenemos, es un sistema para tratar enfermedades que no han podido ser prevenidas.

Son múltiples los factores que intervienen  donde no todo depende de la disponibilidad y la accesibilidad a los  servicios  médicos. 

En estos tiempos, se agregan otros elementos relacionados con la propia vulnerabilidad de los seres humanos y la falta de consciencia sobre el auto cuidado, hábitos saludables  y calidad de vida, lo cual nos convierte en seres irracionales con capacidad de hacernos daños a nosotros mismos.

Esa conducta, en el seno de   una población que no reciba educación, promoción  y prevención para la salud, trae como consecuencia el incremento de enfermedades muy ligadas en su génesis a los malos  hábitos y estilos de vida.

El cáncer, las enfermedades cardiovasculares, las enfermedades pulmonares crónicas, así como la obesidad y la diabetes, representan las principales patologías que afectan a los dominicanos.   Sin olvidar nuestros indicadores de salud en relación con mortalidad materna e infantil los cuales continúan en niveles inaceptables.

De lo anterior se desprende,  la necesidad de establecer  programas de educación y   prevención en la población. Esto nos permitiría, tal y como plantea la Organización Mundial de la Salud,  ser mucho  mas eficientes en   el  gasto en salud y mejoraríamos  la calidad de vida de la gente.

Durante los últimos años, son evidentes las acciones que se vienen ejecutando con la intención de mejorar nuestro sistema de salud.

El gobierno central está llevando a cabo un plan de remodelación de viejas y obsoletas estructuras hospitalarias, tanto en la ciudad capital como en el interior. 

Nos referimos a hospitales emblemáticos que se habían deteriorado y convertido en  sanatorios en  condiciones infrahumanas y  con gravísimas precariedades, que más bien recreaban a la obra pictórica “El Inferno de Dante”.

Otra ejecutoria de impacto  es la construcción de centros diagnósticos en diferentes lugares del país con fines de  desconcentrar los centros hospitalarios.

Además , hay que  resaltar los proyectos e iniciativas que se están desarrollando para la atención de niños y niñas con necesidades especiales.

Los Centros de Atención Integral para la Discapacidad (CAID), han sido concebidos bajo un modelo integral únicos en nuestra región.  Estos centros representan por primera vez el interés del estado dominicano en desarrollar una iniciativa, tomando el principio de inclusión a la diversidad.

Hace apenas dos días, nuestras cámaras legislativas aprobaron la creación del Sistema Nacional de Salud.  Se trata de un nuevo marco legal, el cual establece la descentralización y la autonomía de los servicios de salud y la organización de una red de atención.   Esto facilitara y deberá mejorar la capacidad de respuesta de manera organizada  de los centros públicos de salud.

El  espíritu de esta Ley es de elevar sustancialmente la capacidad resolutiva y lograr un mayor costo-efectividad en los centros de salud, para lo cual será  necesario la implementación de un modelo gerencial  sustentado en la mejores practicas administrativas, que deberá incluir la  supervisión, la rendición de cuentas y en el mejoramiento continuo de la calidad.

En cuanto a las universidades, su papel debe ser el de continuar aportando capital humano necesario y de calidad, y apoyándose en la   investigación  como  herramienta que sirva para analizar  los problemas y plantear posibles soluciones .

Las universidades  concentran muchos talentos y  expertos los cuales deben  estar a la disposición de  los gobiernos y   poder  participar activamente en la discusión y análisis de los principales problemas   sin salirse de su marco  y  enfoque académico .

Definitivamente, se percibe que estamos muy cerca de colocar la salud en un primer orden en la agenda de desarrollo, tal vez como lo estableció en su momento el actual gobierno con la educación.

Se trata de dos sistemas que comparten almas gemelas: salud y educación deben marchar al mismo ritmo, ya que uno se entrelaza con el otro.  Sin salud es difícil desarrollar un sistema educativo efectivo, y sin educación es imposible llevar a cabo promoción y prevención de la salud ni garantizar el estado de bienestar.

Estimada clase graduanda, les aguardan grandes desafíos y retos, los cuales  desde ya les invitan a ser agentes de cambio para lo cual  tendrán que asumir un rol participativo y de lideres. 

Decidieron voluntariamente tomar este camino.  Se trata de un trayecto en el que la responsabilidad y la dedicación son sus normas y la solidaridad, una obligación.

Por lo cual, en esta ocasión, más que una celebración, se trata de un juramento frente a su comunidad.

UNIBE de alguna forma, al entregarles sus títulos, les está endosando su nombre y su prestigio ,  pero está confiada de que harán buen uso a sus nuevas credenciales.

A partir de ahora se abren nuevos horizontes y nuevos retos.  Hagan del uso de sus facultades un ejercicio ético, tolerante y compasivo.  Usen su inteligencia y sus mejores intenciones para la construcción de una solida  personalidad profesional.  Que sea sabia, prudente y estudiosa.  Que inspire confianza y sabiduría.

Como academia, esperamos que mantengan  inmaculado el hábito representado en el médico por su bata blanca; no permitan que les salpique el indecoro y la mala práctica. 

Finalmente, les deseamos éxitos y no olviden a su universidad, a partir de ahora ustedes se convierten en el más preciado activo de nuestra alma mater, nuestros egresados.

Que Dios les acompañe

Muchas gracias