SANTO DOMINGO, República Dominicana.- Representantes de organizaciones de mujeres se presentaron la mañana de este jueves ante el Congreso Nacional para reclamar atención a la salud de la mujer y la no discriminación en la toma de decisiones políticas, con motivo de conmemorarse el 28 de mayo el Día Internacional de Acción por la Salud de la Mujer.
En un documento entregado a los congresistas dicen que cada año mueren en la región 22 mil mujeres por causas perfectamente prevenibles, con las vinculadas a la mortalidad materna. Dicen que en la República Dominicana mueren cada año 159 mujeres por cada 100 mil nacimientos, lo que duplica la tasa de mortalidad de la región
"Esto requiere un compromiso real por parte de los tomadores de decisiones con las políticas públicas y los presupuestos necesarios para superar las limitaciones actuales en el acceso de las mujeres y las adolescentes a información, recursos y servicios", dice el documento de las organizaciones que trabajan con la salud de la mujer.
A continuación el documento entregado a los congresistas:
Al Congreso Nacional y Ministerio de Salud Pública
Desde 1987, las organizaciones de mujeres de todo el mundo conmemoran el 28 de mayo el "Día Internacional de Acción por la Salud de la Mujer", con el objetivo de sensibilizar y movilizar a los tomadores de decisiones –y a la sociedad en general— en torno a la problemática de salud de las mujeres, particularmente la mortalidad materna. En América Latina y el Caribe mueren cada año 22,000 mujeres por esta causa, tratándose en casi todos los casos de muertes prevenibles.
Según las estadísticas oficiales, en el primer cuatrimestre de este año se registraron 41 muertes maternas en nuestro país, cifra superior a las de todas las enfermedades bajo vigilancia epidemiológica. Cabe destacar que esta cifra triplica el número de muertes causadas por el cólera en el mismo período, por lo que resulta inexplicable que las muertes maternas no susciten los mismos niveles de alarma y preocupación.
Ante esta situación, representantes de organizaciones que conforman la Red Dominicana por la Salud de las Mujeres (REDSAM) y otras organizaciones independientes, hemos venido en el día de hoy hasta el Congreso de la República a manifestar nuestra profunda preocupación ante lo que, en términos de mortandad, constituye la mayor crisis sanitaria que enfrenta la sociedad dominicana en la actualidad.
La tasa de mortalidad materna de nuestro país alcanza 159 muertes por 100,000 nacimientos, lo que duplica la tasa promedio para la región de Latinoamérica y Caribe. Pero a diferencia de otros países con tasas elevadas de mortalidad materna, en República Dominicana el 95% de las embarazadas recibe atención prenatal y el 98% de los partos son institucionales, por lo que la solución del problema no pasa por la ampliación de la cobertura del sistema de salud sino por la mejora de la calidad de los servicios que éste ofrece. La quinta parte de las muertes maternas corresponde a mujeres adolescentes, o sea 20 de cada 100.
En última instancia, las muertes maternas –así como las cifras escandalosas de embarazo adolescente- ponen de manifiesto las limitaciones que las mujeres dominicanas enfrentan para el ejercicio de sus derechos humanos en el ámbito de la salud, particularmente sus derechos sexuales y reproductivos, incluyendo: el derecho a recibir una atención de calidad en el embarazo y parto; a regular la fecundidad con métodos eficaces, seguros y asequibles; a protegerse de infecciones de transmisión sexual y, en general, a ejercer una sexualidad sin riesgos ni consecuencias indeseables e inoportunas.
Esto requiere un compromiso real por parte de los tomadores de decisiones con las políticas públicas y los presupuestos necesarios para superar las limitaciones actuales en el acceso de las mujeres y las adolescentes a información, recursos y servicios. Limitaciones que, entre otras cosas, se manifiestan en las deficiencias y/o ausencia de educación sexual en las escuelas; en la falta de servicios integrales de salud sexual y reproductiva para adolescentes y jóvenes; en leyes obsoletas que penalizan el aborto aún cuando la vida de la mujer está en peligro o el embarazo es fruto de violación sexual o incesto.
Expulsar a las adolescentes embarazadas del sistema educativo no soluciona el problema de la maternidad precoz, sino que lo agrava; penalizar el aborto no evita su ocurrencia, sino que lleva a prácticas peligrosas que incrementan el sufrimiento y las muertes de mujeres, sobre todo de las más pobres; encubrir las deficiencias en la atención médica en lugar de exigir rendición de cuentas seguirá incrementando el número de muertes maternas en los hospitales, que según las estadísticas oficiales han subido de 160 en el 2007 a 200 en el 2010. Esas muertes innecesarias, el 70% prevenibles, constituyen una vergüenza nacional y reclaman a gritos un compromiso serio de prevención por parte de las autoridades competentes.
Está claro que el país no podrá honrar el compromiso de reducir la mortalidad materna en tres cuartas partes para el año 2015, como parte del cumplimiento de los Objetivos del Milenio, pero también está claro que no se puede seguir postergando la solución a este problema. Las y los legisladores tienen responsabilidades que cumplir en este sentido, al igual que las autoridades de salud pública y otros tomadores de decisión. La salud y la vida de miles de mujeres dominicanas depende de ello.
En orden a lo anterior venimos al Congreso y al Ministerio de Salud Pública a demandar::
Que en el presupuesto Nacional asignado al Ministerio de Salud Pública se identifique una partida presupuestaria destinada a la maternidad segura.
Que el Congreso Nacional a través de las Comisiones de Salud y de Género de ambas Cámaras en función de su rol de fiscalización establezca un sistema de seguimiento a las muertes maternas y comparecencia periódica de los responsables para rendir informes.
Que se despenalice el aborto terapéutico y por violación.
Que se adopte una ley marco sobre salud sexual, salud reproductiva y maternidad segura.
Que cese la impunidad y el encubrimiento a los responsables de las muertes maternas.
Que el Ministerio de Salud Publica adopte medidas estructurales para mejorar la calidad de los servicios de salud materna.
Que se incluya de manera activa a las organizaciones de mujeres y de la sociedad civil que realizan trabajo en campo de la salud de las mujeres en todas las acciones de planificación, ejecución y monitoreo de planes, programas, proyectos y políticas encaminados a reducir la mortalidad materna.
Organizaciones que conforman la Red Dominicana por la Salud de las Mujeres (REDSAM) y organizaciones de la Sociedad Civil: Red de Salud de las Mujeres Latinoamericanas y del Caribe, Colectiva Mujer y Salud, Centro de Investigación para la Acción Femenina (CIPAF), Alianza Solidaridad por la Lucha Contra el Sida (ASOLSIDA), Amigos Siempre Amigos (ASA), Asociación pro Desarrollo de la Mujer y Medio Ambiente (Aprodema), Asociación de Enfermeras Graduadas (ADEG), Asociación Pro Bienestar de la Mujer (Profamilia), Asociación Tu Mujer, Centro de Apoyo Aquelarre (CEAPA), Centro de Investigación Integral (COIN), Centro de Promoción y Solidaridad Humana (CEPROSH), Centro de Servicios Sociales (CENSEL),Centro de Solidaridad para el Desarrollo de la Mujer(CE-MUJER), Centro Dominicano de Estudios para la Educación (CEDEE), Circulo de Mujeres con Discapacidad (CIMUDIS), Comité por la Unidad y los Derechos de la Mujer (CUDEM), Coordinadora de Animación Sociocultural (CASCO), Movimiento de Mujeres Dominico Haitianas (MUDHA), Movimiento de Mujeres Unidas (MODEMU), Mujeres Dominicanas en Desarrollo (MUDE), Núcleo de Apoyo a la Mujer (NAN), Promoción de la Mujer del Sur (PROMUS), Red Dominicana de Personas VIH/SIDA (REDOVIH), Red Nacional de Jóvenes, la Multitud, Coordinadora de Mujeres del Cibao (CMC), Equipo Educación Mujeres Raíces (EEMUR), Instituto Nacional de la Salud (INSALUD), Junta de Mujeres Mamá Tingo,
Santo Domingo, República Dominicana
26 de mayo del 2011