SANTO DOMINGO, República Dominicana.-El ministro de Economía Planificación y Desarrollo (MEPyD), Temistocles Montás, resaltó que la República Dominicana ocupa el segundo lugar en el mundo en muertes por accidentes de tránsito, con 42 por 100 mil habitantes en el año 2013.
Destacó que ocurrieron alrededor de 1, 800 fallecimientos, 2.5 veces el promedio latinoamericano y caribeño, que fue 17 por 100 mil habitantes y 4.1 veces el promedio de la media de la Unión Europea, 10 muertes por cada 100 mil.
Asimismo, informó que esta alta tasa de accidentalidad conlleva a un costo estimado de alrededor de US$700 millones anuales y más 75% del gasto social en salud pública. “Esta alta tasa de accidentalidad nuestra, deriva tantas veces en pérdidas de vidas humanas y lesiones permanentes”, manifestó.
Montás dijo que durante el año 2013 en el país ocurrieron 1, 402 accidentes con víctimas en zona urbana y 1, 922 con víctimas en la interurbana, según las cifras de la Autoridad Metropolitana del Transporte (AMET).
Apuntó que el 85 % de las víctimas mortales a 30 días eran usuarios vulnerables, es decir de vehículos motorizados de 2 ó 4 ruedas ciclísticas o peatones.
Recordó que el país, con más de 48 mil kilómetros cuadrados y más de 10 mil dólares por habitantes, tiene un parque vehicular antiguo y de baja calidad mecánica con 3.2 millones de unidades, de las cuales la mitad son motocicletas y una relación de un vehículo utilitario por cada siete personas.
Durante un foro sobre accidentes de tránsito Montás se reunió con el presidente de Federación Internacional de Automovilismo (FIA), Jean Todt, y el presidente del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), Luis Alberto Moreno, denominada “Pavimentando el camino hacia la seguridad vial”, donde instó a dichos entidades para el diseño de la Estrategia de Seguridad Vial de República Dominicana que ayude a evitar el alto número de muertos por accidentes de tránsito.
Montás indicó que esas cifras revelan un problema serio de desarrollo para el país visualizado en la Estrategia Nacional de Desarrollo que como instrumento trazó las pautas de política para un marco regulatorio e institucional que garantice un sistema de transporte de carga y de pasajeros de calidad.
En ese sentido trajo a colación los esfuerzos nacionales que principalmente con auspicio del BID y del Banco Mundial se llevan a cabo hacia el diseño de la Estrategia de Seguridad Vial donde participa también Corea del Sur, que redujo en 50% su accidentalidad en sólo diez años.
“Tenemos un problema serio en materia de seguridad vial; ese problema tiene un impacto-desarrollo significativo. El gobierno está respondiendo con la formulación de políticas y la implementación de acciones de respuestas. La sociedad espera los resultados”, comentó el funcionario.
Aseveró que el problema es complejo y que requiere intervenciones en muchas direcciones, entre otras, de políticas públicas de movilidad y de transporte que contemplen medidas de planificación territorial y urbana para satisfacer las diferentes necesidades de desplazamiento de personas y mercancías, no solo en el ámbito urbano sino también regional e interregional.
Reconoció también que hace falta educación vial, actitud y cultura de prevención, así como mucha colaboración ciudadana que fecunden las políticas públicas que se implementen.