Santo Domingo.- Profamilia mostró su preocupación de que iniciando esta legislatura, los congresistas se estrenen incumpliendo los compromisos asumidos con las mujeres durante la campaña electoral pasada, así como declaraciones y acuerdos establecidos con la aprobación de un Código Penal que contemple la despenalización del aborto en tres casos excepcionales.
Exigió que se presente un proyecto de ley de Código Penal que contemple la despenalización del aborto cuando la vida de la mujer corra peligro, cuando el embarazo sea producto de una violación sexual o incesto y en caso de que existan malformaciones incompatibles con la vida, como aparece en la Observación del Poder Ejecutivo de diciembre del 2016, y que las bancadas de los principales partidos políticos se comprometan a aprobar esta pieza legal en los primeros 100 días de su gestión congresual.
Recordó que en mayo del pasado año, el diputado Pacheco expresó ante la Academia de Ciencias de la República Dominicana y la Coalición por la Vida y los Derechos de las Mujeres, que el Partido Revolucionario Moderno defiende la modificación del Código Penal con las tres causales, indicando que “nosotros en el PRM estamos comprometidos con esta legislación tal y como se ha concebido. Por eso agradecemos la invitación y el empeño de los convocantes de esta actividad”, según recoge el Diputado Digital, órgano informativo de la Cámara de Diputados.
Resulta contradictorio un cambio de opinión tan pronto asume el poder, luego de expresar que garantizaría el derecho a la vida y a la salud de tantas mujeres que enfrentan la difícil situación de no poder interrumpir un embarazo aunque éste amenace su vida o su salud, debiendo enfrentase a poner su vida en mayor peligro con un aborto clandestino en situaciones de insalubridad.
Esta situación se ha visto agravada en el contexto de la pandemia por el COVID-19 y las restricciones de circulación, donde las mujeres y adolescentes que son víctimas de violencia han tenido que convivir en confinamiento con sus agresores y con limitaciones de acceso a anticonceptivos y a todo servicio de salud sexual y reproductiva.
Profamilia apoya totalmente a esas mujeres que salieron a votar a pesar de enfrentar una pandemia sin precedentes, por legisladores que prometieron defender su vida y su salud y por un Presidente que reconoció que la prohibición no ha frenado el aborto clandestino y que apoyó la observación al Código Penal relativas al derecho a la vida y la salud. Las mujeres no aceptan ser excluidas del Código Penal y sus derechos relegados a una ley especial que puede obligarlas a parir el hijo de su violador, morir en situaciones de salud inseguras o ser encarceladas.
Enfatizó que el nuevo Gobierno hereda la deuda histórica que gobernantes y legisladores pasados no quisieron asumir para garantizar la vida y salud de las mujeres, especialmente de las más pobres, que carecen de recursos para acudir a la clandestinidad con seguridad, como otras tienen el privilegio de hacer.