SANTO DOMINGO, República Dominicana.- El Comité Técnico de la Comisión Nacional de Emergencias se reunió este miércoles con representantes del proyecto “Estudio de la amenaza sísmica y vulnerabilidad física del Gran Santo Domingo” para conocer los avances de los estudios geológicos, estructurales y de vulnerabilidad que se realizan en cuatro de los municipios de la provincia de Santo Domingo, tres municipios de la provincia San Cristóbal y el Distrito Nacional, implementado por el Servicio Geológico Nacional (SGN) con el apoyo del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) y el financiamiento principal de la Unión Europea.
Sobre el estudio, el mayor general Rafael Emilio Luna Pichirilo, presidente de la Comisión Nacional de Emergencias, indicó que las investigaciones permitirán mejorar el conocimiento sobre la amenaza sísmica y ayudarán a identificar la vulnerabilidad sísmica del área, lo que serviría para mejorar la planificación urbana y establecer políticas públicas que contribuyan con la reducción del riesgo sísmico.
Especialistas del proyecto mostraron mapas geológicos que sirven de base al proceso de microzonificación sísmica del Gran Santo Domingo, los avances del estudio de vulnerabilidad física de una zona del Gran Santo Domingo y los avances en el estudio de vulnerabilidad física de 23 edificios gubernamentales estratégicos para determinar si están en condiciones de ser operativos en casos de eventos sísmicos severos, entre ellos el Juan Pablo Duarte (El Huacal).
Para el desarrollo de estos insumos se cuenta con el apoyo técnico del Servicio Geológico Nacional, el Instituto Geológico y Minero de España, el Servicio Geológico Francés y el CNR-IRISS de Italia, la Oficina Nacional de Evaluación Sísmica y Vulnerabilidad de Infraestructura y Edificaciones (ONESVIE), el Ministerio de Obras Públicas y los Ayuntamientos del Gran Santo Domingo y San Cristóbal.
“La mayoría de los proyectos tienen un enfoque hacia la emergencia y esta iniciativa busca cambiar el rumbo. Debemos trabajar en la prevención y la prevención comienza con la previsión, por eso la implementación de estos estudios nos ayuda a entender la situación en que se encuentra la ciudad y sus zonas aledañas; y son un insumo muy valioso para el ordenamiento territorial y el planeamiento urbano que desarrollan los ayuntamientos. Partiendo de los resultados, se podrán establecer líneas estratégicas de intervención a corto, mediano y largo plazo, que permitan reducir la vulnerabilidad sísmica del Gran Santo Domingo”, explicó el director del Servicio Geológico Nacional, Santiago Muñoz.
A través de estos estudios se busca identificar la respuesta del terreno a los sismos (amenaza), que dependiendo de la geología y geomorfología es diferente por cada zona. Los estudios también sirven para establecer cómo podría ser utilizado cada terreno y qué medidas se pueden adoptar para reducir el riesgo sísmico. De igual forma, contribuirían con la modificación del Reglamento Sísmico basándose en información actualizada.
Se espera que los resultados del estudio, que lleva dos años en desarrollo, puedan ser presentados en mayo, y se conviertan en una herramienta de trabajo para que la Comisión Nacional de Emergencia a través de su Comité Técnico promueva políticas públicas orientadas a la reducción del riesgo sísmico.